El arte total de Joan Brossa aterriza en Fuenlabrada
Esculturas y literatura, letras que se convierte en arte: el artista catalán cruzaba distintos géneros para crear el género de la poesía visual, como se puede ver en esta exposición

Ironía y arte se juntan en el talento de Joan Brossa. Foto Ceart Fuenlabrada
Joan Brossa creía en el ‘arte total’, la combinación de disciplinas para llegar a conmover al espectador; ya sea con poesías, cine, magia, arte, performances, esculturas, etcétera.
Era lógico que una exposición, como la que presenta el CEART de Fuenlabrada, se llame Brossa Total, que se puede ver hasta el 24 de abril.
100 piezas para conocer el arte total de Brossa
Allí se presentan 100 piezas de este inclasificable y talentoso artista catalán, entre poemas visuales, poemas corpóreos, fotografías, libros, esculturas, fragmentos de películas, etcétera.
Los poemas visuales y los corpóreos son algunas de las piezas que Brossa creó en su concepto de ‘arte total’
En la muestra será posible navegar a través del Relato que hizo popular Brossa, el cual le llevó a formar parte del grupo Adlan, junto con Joan Miró y Joan Prats.
Otra etapa de Brossa que se puede conocer en Fuenlabrada es la creación de la revista Day al Set, donde también participaron los pintores Joan Ponç, Antoni Tàpies, Modest Cuixart y Joan-Josep Tharrats, junto con el filósofo Arnau Puig y el poeta Juan Eduardo Cirlot.
Un artista en un mar de disciplinas
Brossa se podía presentar como poeta y artista visual; dramaturgo, guionista de cine o escultor. No había campo que no le apasionara, ya sea el circo y las filosofías orientales, los caligramas de Mallarmé y Apollinaire y la métrica tradicional; el psicoanálisis y la lucha política.
El teatro experimental de Brossa en los años ’40 fue precursor de las performances y los happenings que tan de moda estuvieron en los años ’60
Con su teatro experimental, en los años ’40 fue un precursor de las performances y los happenings que tan de moda estuvieron en los años ’60.
Un adelantado a su tiempo
Otros campos en los que Brossa fue un adelantado son el juego entre la ironía y el énfasis en lo lúdico, el gusto por el lenguaje coloquial y los espectáculos populares, así como las prácticas colaborativas con otros artistas.
“La obra de Joan Brossa, pensándolo como poeta o como artista, ambas facetas de su trabajo intricadas e indisolubles, se ha vuelto, con el paso de los años, cada vez más atractiva”, precisó Enrique Juncosa.
La influencia de Brossa se cruza con el legado de artistas como Chema Madoz, Marcel Duchamp, John Cage, Nicanor Parra o el grupo Fluxus, entre otros. La muestra de Fuenlabrada es un buen testigo para descubrirlo.
Muchas de las obras expuestas pertenecen a la colección del galerista Miguel Marcos, quien ha representado la obra de Brossa desde los años 90, aunque se incluyen también algunos préstamos procedentes de grandes colecciones públicas y privadas.