Rumbo a Hollywood en 13 horas y seis películas de Filmin

El icónico barrio de Hollywood parece de otro mundo y, sin embargo, es más accesible que nunca. Se sitúa a unos 10.000 kilómetros de España, pero aun así lo hemos visto tantas veces en pantalla que nos da la sensación de haber estado allí.

Conocemos el paseo de la fama que luce las más de 2.000 estrellas de cinco puntas con los nombres de las celebridades; el teatro Dolby en el que cada año tiene lugar la gala de los Oscar -y en el que Will Smith abofeteó a Chris Rock este año-, y el mítico letrero en lo alto de la colina que luce el nombre del distrito más famoso de Los Ángeles que ha aparecido en tantas películas.

En la mañana del 2 de enero de 2017, un desconocido subió a lo alto del Monte Lee y sustituyó las dos oes por es –Hollyweed- para celebrar que la marihuana ya era legal en California. Aquella imagen dio la vuelta al mundo. Sin embargo, no era la primera vez que ocurría algo así. Justo 41 años antes, en 1976, un hombre llamado Daniel N. Finegood quiso conmemorar la entrada en vigor de una nueva ley que despenalizaba la posesión de cannabis en la región.

Los Ángeles, ciudad de cine

Pero por lo que más conocemos Los Ángeles es por su gran importancia en el mundo audiovisual. Este territorio, gracias a su clima, se ha convertido en el mayor escenario cinematográfico de todos los tiempos. Entre otras miles de películas, en esta ciudad se rodó la inquietante Carretera perdida (1997) de David Lynch.

Cuando este director llegó a LA a principios de los setenta, lo primero que le llamó la atención fue su luz. Dijo que ninguna ciudad brilla como ella. “Incluso con niebla, hay algo en su luz que no es severo, sino brillante y suave. Me hace sentir que todo es posible”, aseguró. Y ahora cualquiera puede convertirse en el protagonista de su propia historia hollywoodense.

Tan solo nos separan 13 horas y unas seis películas de Filmin de esta localización. Level, la aerolínea de bajo coste y largo radio de IAG,con base en Barcelona, vuela sin escalas a Los Ángeles. De hecho, es el único vuelo que conecta de forma directa a la capital catalana tanto con esta ciudad como con Nueva York, Boston y San Francisco.

Guía de Filmin y Level

Y, con el objetivo de apoyar el talento de su ciudad natal, en este caso, el de la industria cinematográfica catalana, Level ha lanzado una guía de viaje junto a la plataforma de cine española.

La guía, creada por ambas marcas, quiere acompañar al público en su viaje al país que ha sido escenario de tantas localizaciones de cine y sets de grabación de diferentes películas. El documento ya está disponible en el servicio de entretenimiento a bordo de la compañía aérea para que el viaje sirva como antesala de los lugares que se podrán visitar al llegar al destino.

Como parte del acuerdo, Filmin lanzó en diciembre una colección de películas titulada Living in America, que incluía títulos relacionados con las ciudades a las que Level vuela en Estados Unidos.

Filmin: de ‘Carretera perdida’ a ‘The Bling Ring’

De la ciudad angelina la plataforma elige mostrar la filmografía del ya citado David Lynch. La guía explica que cuando este director, procedente de Filadelfia, pisó la ciudad del sur de California se enamoró de esta tierra y aprovechó para rodar en algunas localizaciones menos conocidas.

Cuando David Lynch pisó LA se enamoró de esta tierra y aprovechó para rodar en algunas localizaciones menos conocidas

Es el caso del edificio Firestone, el garaje de Arnie en ‘Carretera perdida’ (1997), recordado por la escena a cámara lenta de Patricia Arquette con This Magic Moment de Lou Reed sonando de fondo. «Después de cuatro años de reformas, esta joya vintage ha vuelto a abrir sus puertas manteniendo la mayor parte de su decoración original. Lo que sí se ha actualizado es su cometido: ahora se pueden pedir tacos, cerveza y jugar con grandes máquinas recreativa», explican desde Filmin.

En contraposición a Lynch, Sofia Coppola sí apuesta por los paisajes más típicos hollywoodenses. Dos ejemplos son ‘Somewhere’ (2010) y ‘The Bling Ring’ (2013). En la primera de ellas, el protagonista, Johnny Marco, vive en el hotel Chateau Marmont. En sus habitaciones se han hospedado todas las grandes leyendas del cine y la música.

Cerca de West Hollywood, en Beverly Hills, Emma Watson cumplió el sueño de cualquier fan de las estrellas de cine: ver sus casas por dentro. Con su grupo de amigas, conocidas como las bling ring, se cuelan en las mansiones de Paris Hilton, Lindsay Lohan y un largo etcétera, fantasean con sus vidas y roban algunas de sus prendas. En total, el grupo de adolescentes (el real) sustrajo en 2009 objetos y dinero valorados en tres millones de dólares.  

La ropa que les sobraba de toda la que robaron la vendían en el paseo de Venice Beach, una playa emblemática donde se juntan surfistas, skaters y performers de todo tipo desde hace décadas. La pandilla de adolescentes causó sensación por su habilidad para irrumpir en casas ajenas (ningún famoso volvió a dejar las llaves debajo de la alfombrilla), pero no propagó el caos por la ciudad.

La quinta película de la que puedes disfrutar en el vuelo es ‘Días extraños’ (1995), una distopía extraordinariamente visionaria situada en los últimos días del siglo veinte. Las 77 noches de rodaje culminaron en una gran fiesta de fin de año en Downtown de Los Ángeles, el centro de la ciudad que, a diferencia de hace una década, se puede recorrer andando y ya no es peligroso.

Eso es lo que hizo el director Sean Baker, que al llegar la intersección entre Highland Avenue y Santa Monica Boulevard pensó que en aquella esquina «seguro que ocurrían historias increíbles», cuenta la guía. Y con solo dos iPhones, Baker dio voz a dos trabajadoras sexuales transgénero, Sin-Dee y Alexandra, que acabaría convirtiéndose en su aclamada película Tangerine (2015).