Dani García desembarca en París: así es su restaurante en la exclusiva Saint-Honoré

Un pedazo de la Costa del Sol ha aterrizado en París. No podrá garantizar el clima o los más de 320 días de sol que el litoral malagueño disfruta al año, pero sí una cocina de raíces andaluzas y propuestas de vanguardia con la que el chef estrella Michelin Dani García se propone conquistar Francia.

No lo hará con sus ya conocidos (y exportados) Lobito de Mar, Bibo, Leña o SmokedRoom; para ganarse a los franceses, el chef ha ideado un nuevo concepto: La Chambre Bleue, que toma el nombre de uno de los primeros cuadros de Picasso en la capital francesa y con el que, siguiendo los pasos del maestro del cubismo, traza una línea que une París y Málaga a través de platos y sabores.

“La Chambre Bleue es Mediterráneo y es Málaga en París. Representa un cuadro de Picasso, malagueño y con una trayectoria en Francia muy reconocida, y que, además, es un referente mundial en el mundo del arte. La carta representa el mar, el producto, pero sin perder nuestro toque”, apunta el chef español.

La Chambre Bleue

Ubicado en la planta baja de Maison Delano París (Rue d’Anjou, 4), un nuevo y lujoso hotel en el distrito VIII parisino que se alza en una imponente mansión del siglo XVIII a pocos pasos de la elegante Rue du Faubourg Saint-Honoré, La Chambre Bleue se presenta como un refugio para los amantes de la gastronomía española.

No faltan en este nuevo restaurante, muy cerca también del Palacio del Elíseo donde tiene su residencia el presidente de la República, las frituras, los pescados y los mariscos, así como los arroces.

Tampoco otras opciones que reflejan la cocina mediterránea desde un punto de vista internacional.

Qué comer y qué beber en el restaurante parisino de Dani García

Ostras y jamón ibérico de bellota en los entrantes, anchoas y sardinas, escabeches y salpicón de bogavante, pero también calamares fritos están entre los entrantes de la carta de La Chambre Bleue, con servicio de desayuno, comida y cena.

Le siguen platos “con ADN español” como las paellas, que prepara de pulpo, txuleta, anguila ahumada, conejo asado o pollo, y pescados entre los que se encuentra la lubina al horno y el San Pedro, pero también la langosta, la presa ibérica o el cabrito malagueño.

El atún rojo protagoniza una sección completa de la carta, con preparaciones como el trío de tartar, el carpaccio o las croquetas de atún, entre otros que emplean como base todas las partes del pescado, como la ventresca, la parpatana y el morrillo.

En cuanto a la carta líquida, el restaurante ofrece una bodega que es en realidad una inmersión en la historia de los grandes vinos clásicos españoles, con una amplia revisión a las regiones vitivinícolas nacionales y mucha profundidad en añadas.

Cócteles inspirados en Picasso

A esto se suma una carta de coctelería inspirada en la obra de Picasso que toma forma en una selección de 10 cócteles que llevan el nombre de 10 lienzos pintados por el artista durante el Periodo Azul.

El es caso del lienzo La Chambre Bleue, de absenta, manzanilla de Jerez y limón; Évocation, de ratafía, chartreuse verde, moscatel dulce y tónica; La Vie, de armagnac, Dom Benedictine, Lillet Blanc, palo cortado y avellana negra amarga; o El bebedor de absenta, de Bacardi 4, Calvados, sirope de arce, Zacapa 23, naranja amarga y absenta.

Estilo español con toque francés

El restaurante, con capacidad para unos 170 comensales, cuenta con diferentes salones, cocinas abiertas, un bar central y dos bodegas que rodean el patio histórico y que, a su vez, prolonga el restaurante como un agradable comedor, cubierto en invierno y abierto al cielo parisino en verano.

El demandado Lázaro Rosa Violán Studio es el artífice del interiorismo de este proyecto, que integra con elegancia el espíritu andaluz y mediterráneo en la arquitectura original de la construcción.

Las cocinas abiertas, con un puesto de pescado fresco, y los imponentes quemadores de cocción están adornados con un fresco de cerámica con acentos cubistas de ArtAntic L’Alcora.

En el bar, una decoración de azulejos dialoga con la iluminación modernista Lucien Gau.

Mientras, en el comedor, los muebles hechos a medida responden a la tela que adorna las paredes paneladas y los asientos de cuero rojo conviven con los sillones de ratán.

Y el toque francés y cálido de los cojines toile de Jouy de Pierre Frey completan el conjunto para un resultado ecléctico y contemporáneo.

De Marbella a conquistar el mundo

La Chambre Bleue es la primera incursión de Dani García en Francia, un paso más en la expansión internacional del grupo que verá en los próximos meses nuevos establecimientos del chef marbellí en lugares como Dubái, donde aterrizará con sus conceptos Leña y SmokedRoom, o Miami.