Celebra el Día Mundial de la Milanesa en Cedrón: el templo de la cocina argentina y el buen vino en Madrid 

El 3 de mayo se celebra el Día Mundial de la Milanesa, un plato de origen argentino que consiste en un filete de carne, normalmente de ternera, empanado y frita o al horno. También se puede hacer con pollo, cerdo o incluso berenjena, siendo esta una opción ideal para las personas veganas. 

La carne se suele aplanar antes de empanarla para que quede más tierna y se cocine de manera uniforme. La unión entre Italia y Argentina genera la Milanesa Napolitana, que añade a la receta original salsa de tomate, jamón York y queso mozzarella que se derrite durante el cocinado. 

La comunidad argentina es cada vez más grande en Madrid, provocando que su gastronomía se expanda por la ciudad, surgiendo nuevas apuestas como es el caso de Cedrón (Calle del Almendro, 25), un templo culinario que mezcla la cocina albiceleste con la mediterránea, coronando la experiencia con vinos de autor de diversas regiones de nuestro país, así como otras opciones internacionales.

El colorido barrio de La Latina fue es el escogido para esta apuesta. No es casualidad que una de las zonas más castizas de la capital acoja un templo argentino que, por muchos kilómetros que separen, cuenta con muchas costumbres similares a las nuestras. 

Apariencia de bodega, con una luz tenue y música rock de los 80 que condecora la velada. Comenzamos con la bebida. Si eres amante del vino, déjate aconsejar por alguna de las opciones de productores locales que tienen en su carta. Si eres más de cocteles, también hay opciones, todos ellos con nombres de canciones del rock argentino.

Milanesas, comida castiza y cortes argentinos

En la carta de Cedrón podemos observar una variedad basada en la cocina argentina, madrileña y mediterránea. Para abrir boca cuentan con algunos típicos como las croquetas o mollejas de ternera. Además de otros platos como la escalivada, clásico de Cataluña, o el ceviche frito. Antes de decidirte por uno de estos entrantes, te servirán un pequeño aperitivo que se trata de un hummus de remolacha, con un sabor espectacular, acompañado de pan de pizza.

Para los más indecisos, las croquetas nunca fallan. Ideales para ir abriendo boca, con una textura espectacular y un sabor a jamón que, sin ser intenso, se nota a la perfección. La burrata es ideal para los amantes del queso, además de una de las opciones veganas de la carta.

Entramos en la parte clave de la carta, donde se deja a un lado lo típico y se pasa a lo argentino. Las Milanesas son sin duda uno de los platos obligatorios. En Cedrón cuenta con dos tipos: con fritas, acompañada con limón para echar al gusto y patatas fritas, y la Napolitana, servida con jamón York, queso mozzarella, salsa de tomate y rodajas de tomate con orégano y cebolleta, aportando un toque más natural y fresco.

El corte de la carne y rebozado son excelentes, haciendo del bocado algo ligero. La calidad de la ternera se nota en el momento que se deshace en boca. Acompañada con patatas fritas de corte fino y textura crujiente, un plato sencillo pero exquisito, típico de cada casa de la Argentina.

Aunque consideramos que acudir a Cedrón y no probar la Milanesa es todo un error, hay otros platos que merecen ser mencionados. Como ya hemos comentado, existen diferentes cortes de carne típica argentina como el ojo de bife y la entraña. La primera se vende por cada 100 gramos y la segunda se sirve con patatas fritas, ensalada y salsa chimichurri, que aporta ese sabor diferencial de las especies.

Un trozo de carne de primera calidad te transportará a un típico asado argentino, una tradición que consiste en un método de cocinar carne a la parrilla. Sentirás en cada trozo el aroma y sabor del humo de la leña o carbón.

Otras opciones son las albóndigas de buey o el bacalao con salsa verde. La melanzane a la Parmigiana cierra la carta, colocándose como una opción vegana y exquisita. Se trata de una lasaña elaborada con berenjenas, queso Parmigianino, salsa de tomate y hojas de albaca, clásico de la cocina italiana que vuelve a mostrar la estrecha relación que hay entre ambos países.

Y para el postre…

Para cerrar la velada, cuentan con dos postres, uno típico como es la tarta de queso, y el que escogimos en esta ocasión: la chocotorta argentina. Se trata de una especie de tiramisú mezclado con un sabor más a cacao y menos a café. Se siente la textura del mascarpone, el sabor del bizcocho y el cacao en polvo que se esparce por encima.

La tarta de queso también es una gran opción, más aún para los amantes de este típico postre que destaca por su cremosidad.

Terminada la velada, te habrás trasportado a una taberna del colorido barrio de Palermo, en Buenos Aires, sin haber salido de Madrid y, curiosamente, en una de las zonas que destacan por ser lugar de culto de miles de madrileños que acuden a tomar unas patatas bravas, acompañadas de un buen vermú.

Sobre el precio, el medio por persona es de unos 40 euros, teniendo en cuenta que se piden entrantes, principal, postre y bebida. Siempre puedes consultar su carta a la página web del restaurante.