Las Palmas de Gran Canaria de vinos: dónde ir y qué pedir en mercados, vinotecas y bodegas

Además de una buena oferta gastronómica, Las Palmas de Gran Canaria es una puerta de entrada para conocer los vinos de la isla

De vinos por Las Palmas de Gran Canaria

De vinos por Las Palmas de Gran Canaria. Foto: Vinófilos.

Listán negro, marmajuelo, breval, moscatel de Alejandría, tintilla, malvasía volcánica y así hasta más de una veintena de variedades distintas de uva se emplean en Gran Canaria para elaborar vinos que, gracias a las peculiaridades de su clima atlántico y su orografía, conforman un legado único en el mundo.

El sol, los barrancos y los volcanes dan forma a los vinos de Gran Canaria, síntesis también de naturaleza, identidad y cultura. Aquí el carácter volcánico moldea unos vinos elaborados a partir de viñedos que crecen en escarpadas laderas y suelos de picón, y que son bendecidos por los vientos Alisios.

Bodega en Gran Canaria
Un total de 36 bodegas elaboran vinos en Gran Canaria.

Con viñedos repartidos por toda la isla, un total de 36 bodegas elaboran referencias cada vez más reconocidas y valoradas no solo a nivel local, sino internacional, con nombres como Bodegas Bentayga, Bodegas las Tirajanas, Bodega Los Berrazales o Bodega Vandama, responsables de auténticas joyas que ofrecen una manera diferente de conocer la isla.

De vinos en Las Palmas de Gran Canaria

Cosmopolita, abierta a todo tipo de influencias y con una interesante escena gastronómica, la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria es un buen punto de partida para descubrir a fondo sus vinos.

Los aromas dulces y las notas volcánicas presentes en tintos, blancos y semidulces producidos en toda la isla se pueden descubrir muy cerca de la ciudad, en los viñedos se extienden por Tafira, donde se encuentran dos iconos de la ciudad: el Jardín Botánico Viera y Clavijo −el mayor de España y visita obligada en cualquier viaje− y la Caldera de Bandama, donde se cultivan cepas tanto centenarias como nuevas.

El paisaje de la zona, donde el verde de las viñas se mezcla con los oscuros tonos volcánicos de Bandama y su siempre despejado cielo azul, da lugar a una imagen digna de postal.

Caldera de Bandama, Gran Canaria
Caldera Bandama. Foto: Turismo Las Palmas de Gran Canaria.

Una visita por las bodegas locales, como la Bodega Los Lirios, con más de un siglo de historia, o la Enoteca El Zarzillo, con una propuesta gastronómica que fusiona productos locales y sabores internacionales, son un excelente primer contacto con los vinos locales.

Ruta del Vino por Las Palmas de Gran Canaria

Sin salir del centro de la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria también es posible rastrear los sabores de los mejores vinos de Gran Canaria.

La ruta comienza por el Mercado de Vegueta (Mendizábal, 1), el primer mercado de abastos de la urbe con más de 200 años de historia. Aquí es posible degustar gastronomía local y sabores de todo el mundo, pero también catar algunos de los vinos de producción local en el puesto Canary Wine, donde se pueden encontrar más de 300 referencias de la isla, incluidos los de más renombre, pero también proyectos menos conocidos de pequeñas bodegas familiares.

En el barrio modernista Triana, por su parte, no puede faltar una parada en Vinófilos (Viera y Clavijo, 23). El conocimiento experto de los sumilleres de este local con una selección de vinos locales y otras bodegas permite descubrir de una forma única los mejores caldos, que maridan platos de gastronomía canaria para completar la experiencia. En su local, más de 80 referencias en copas y unas 950 en botellas listas para llevar a casa.

No muy lejos, Entre Viñas (San Bernardo, 17) es un buen lugar para disfrutar de vinos maridados con tapas y tostas. Y, si hay suerte, también con música en directo.

Otra parada en el barrio es Torna Wine Bar (Buenos Aires, 16), un espacio que destaca por su selección de vinos locales pero también por su trabajo con productos de temporada, con un menú gastronómico que cambia siguiendo la disponibilidad de productos en el mercado.

Vinófilos, Las Palmas
Foto: Vinófilos.

Además, las calles de este histórico barrio acogen también al restaurante Santullán (Travieso, 27), donde probar la combinación de gastronomía clásica con influencias internacionales y un toque extra de creatividad.

De vinos por el Mercado del Puerto

El paseo vinícola por la capital grancanaria puede continuar por el Mercado del Puerto (Albareda, 76), otro de los enclaves gastro por excelencia de la ciudad. Remodelado en 1994, es un edificio modernista de 1891 diseñado por el francés Gustave Eiffel que cuenta hoy con puestos y rincones gastronómicos, por lo que es perfecto tanto para comprar productos como para saborear unas tapas acompañadas en sus soportales.

Muy cerca de la playa de Las Canteras, dentro del mercado se ubica Piscos & Buches, donde se pueden degustar más de 15 vinos de la región, que maridan a la perfección con su carta de platos y picoteo canarios.

Piscos y Buches, Las Palmas de Gran Canaria
Foto: Piscos y Buches.

Cruzando el istmo de Las Palmas de Gran Canaria hacia la Isleta, la ruta termina en el restaurante El Padrino (Calle Jesús de Nazareno, Ctra. de las Coloradas), un local de fuerte legado familiar y auténtica cocina canaria.

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