Reversible: tapas, quesos, arroces y un abanico de ideas para descubrir

La reforma del hotel Indigo Plaza España trae a Barcelona un nuevo restaurante que acoge tanto a los vecinos del barrio como a los viajeros con varias propuestas en un mismo espacio

Huevos con bogavante, uno de los platos estrellas de Reversible. Foto: Jordi Domènech.

En las últimas décadas los hoteles se han preocupado en evitar la imagen de reductos exclusivos para turistas, y despliegan toda clase de propuestas para que los barceloneses se animen a incorporar sus bares, restaurantes y coctelerías en sus salidas.

Esto no se limita a los establecimientos de lujo, sino que los hoteles de menor categoría también se suman a esta tendencia, como es el caso del Hotel Indigo Plaza España con su nuevo restaurante Reversible, que ofrece una propuesta informal sin dejar de lado la calidad, con un interesante giro al tapeo ‘de forquilla’ y diferentes opciones en un mismo espacio.

Arroz con tataki de ternera. Foto: Jordi Domènech.

El tenedor más curioso

En un ambiente decorado con desenfadado, con guiños a la vecina montaña de Montjuic -de ahí que haya tantas plantas en la sala-, luces de neón y cuadros que mezclan el arte pop con Paul Gauguin, el chef Víctor Alfageme presenta una carta con un buen despliegue de tapas y entrantes, que se acompaña de un curioso tenedor de seis puntas llamado ‘peineta’.

El original tenedor concebido para tapear con toda comodidad. Foto: Jordi Domènech.

Al principio desconcierta este pequeño elemento de la vajilla, pero enseguida uno se da cuenta que tiene el tamaño justo para atrapar las porciones de los platos, como hemos comprobado al comer la burrata con tomatitos confitados, la ensalada de tomates de la tierra con pimientos rojos, el exquisito carpaccio de picaña madurada 30 días, o las croquetas cremosas de jamón ibérico y gamba roja.

Otras ideas para el tapeo y las comidas

Otros platillos que hemos probado, y nos han gustado, han sido el aguacate a la brasa, con dados de queso de cabra y pico de gallo; y la potente combinación de calamar y panceta, de un tamaño más grande de lo que uno hubiera esperado.

Además de otras alternativas para el tapeo como el steak tartar, la coca mediterránea, el bao catalán o las albóndigas con sepia, en Reversible se puede subir de peldaño y enfilar hacia platos más potentes.

El chef Víctor Alfageme en la sala de Reversible. Foto: Jordi Domènech.

Por ejemplo, aquí se encuentra el pescado del día, diversos tipos de arroces (de gamba y calamar, de tataki de ternera o de setas y alcachofas), los huevos con bogavante braseado o el chuletón madurado 30 días (en 500 o 1.000 gr).

La peineta es un tenedor específicamente diseñado para atrapar el tamaño justo de las tapas y otros platillos

Terruar, el tardeo de quesos y vinos

Además de los cócteles de autor y los clásicos, en el restaurante se apuesta por la cultura del vino. De hecho, la casa ofrece un cava natural de cortesía, y en su afán de divulgación durante el mes de junio presenta la propuesta Terruar: vinos y quesos de territorio.

Selección de quesos y vinos naturales en Terruar. Foto: Jordi Domènech.

Cada tarde, estará disponible un menú de tres quesos (un curado de leche de cabra, un Tête de Moine afinado con agua de mar y uno de oveja madurado en aceite), acompañados por dos copas de vino natural elegidos entre seis referencias seleccionadas por el distribuidor Jaume Jordà. El precio de este programa de tardeo es de 23 € para dos personas.

Más ideas para disfrutar de Reversible

Otra propuesta de Reservible es La Mesa del Chef, un espacio reservado para 4 a 10 comensales donde el chef Alfageme ofrece un menú especial en el que se asiste a la creación en directo de cada plato, acompañada de una didáctica descripción.

Fusión de sabores con el bao catalán. Foto: Jordi Domènech.

Y a estas variantes gastro se suman actividades como espectáculos de música en vivo, sesiones de DJ o noches temáticas. Como para que cada visita a Reversible sea siempre diferente.

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