DFDS contraataca a Baleària: preacuerdo para quedarse Armas y volver a competir en el ‘estrecho’
La compañía de Adolfo Utor se ha hecho recientemente con la ruta Tarifa-Tánger, que antes pertenecía a la empresa danesa tras comprar FRS

Ferris de Baleària y FRS (perteneciente al grupo danés DFDS) en el puerto de Algeciras.
La danesa DFDS ha contraatacado con fuerza en el estrecho de Gibraltar. Tras quedarse sin la ruta Tarifa-Tánger, adjudicada a Baleària, el gigante nórdico ha dado un paso estratégico al cerrar un preacuerdo para hacerse con la división más rentable de Naviera Armas, la compañía canaria que hasta hace poco sobrevivía entre embargos y fondos oportunistas.
Este movimiento le servirá para retomar el pulso comercial en el Mediterráneo, una zona que considera clave. La jugada le reposiciona además como actor relevante en el tablero de juego entre Europa y África, un eje comercial que había cimentado con la compra de FRS y que se tambaleó al perder la línea de Tarifa.
En enero de 2024, la empresa liderada por Torben Carlsen completó la adquisición de FRS Iberia/Maroc, confiando en consolidar una red sólida en el sur de Europa. Pero en diciembre, la Autoridad Portuaria de la Bahía de Algeciras adjudicó a Baleària la ruta entre Tarifa y Tánger, en un concurso valorado en 160 millones y respaldado por el Gobierno andaluz.
La línea, que los accionistas consideraban como la mitad del ebitda de la compañía, se esfumó en pocos meses. Desde entonces, DFDS ha judicializado el proceso e incluso se ha visto obligada a presentar un ERE y plantear un traslado de su sede de Tarifa a Algeciras. Finalmente, el recurso lo ganó la empresa alicantina encabezada por Adolfo Utor.
La pérdida para DFDS ha tensado, por lo tanto, las relaciones con sus accionistas, que habían depositado altas expectativas en el mercado del Estrecho. Este periódico ha tratado de contactar tanto con esta naviera como con Armas, pero las compañías han decidido no hacer comentarios al respecto.
Un preacuerdo de 330 millones
En concreto, la nueva operación está valorada en unos 300 millones de euros y permitirá a DFDS quedarse con el corazón del negocio de Armas: las rutas del ‘estrecho’, responsables de aproximadamente el 60% del resultado operativo del grupo español.
La compra llega en un momento crítico para Armas. Tras su rescate financiero y la toma de control por parte de fondos como JP Morgan y Barings, la naviera debía hacer frente a un vencimiento de 50 millones de euros antes del 30 de junio. Sin ofertas satisfactorias por el conjunto del grupo, sus dueños decidieron trocear la compañía.
La propuesta de Baleària incluía la adquisición de dos terceras partes de las rutas, es decir, las de las Islas Canarias y las de Alborán, con opción a incluir en el futuro las del estrecho del Gibraltar. Boluda, por su parte, pretendía reforzar sus líneas con Canarias, ya existentes en la empresa valenciana.
DFDS, por su parte, en su último informe anual, consultado por Economía Digital, valoraban la línea como uno de los motores de crecimiento del grupo gracias a la deslocalización industrial hacia Marruecos.
Un 2025 de descensos en el área de ferris
En la memoria del primer trimestre de 2025, la empresa del norte de Europa ya ha registrado una caída del 5% de su negocio de ferris en el primer trimestre del año. Ha pasado, específicamente, de 5.650 millones de euros a 5.350 millones, si comparamos este periodo con el mismo de 2024.
Esto supone que la división, que antes constituía el 60% de los ingresos, ahora represente un 53% y dé paso a una presencia más igualitaria del área de logística. Esta, por su parte, ha crecido casi un 30% en cuestión de un año, rozando los 5.430 millones de euros en el primer trimestre de 2025.
Para los próximos meses, la propia compañía reconoce en su informe que «la pérdida de la ruta Tarifa-Tanger Ville a partir de principios de mayo de 2025 reducirá el número de pasajeros».