Escribano arranca 4 millones a Juanma Moreno tras invertir junto con Indra 130M€ en Andalucía
El grupo de defensa amplía su huella industrial con proyectos en Linares y Córdoba, mientras Indra prepara un plan de 80 millones y estudia fusionarse con EM&M

El presidente de Indra, Ángel Escribano, junto al presidente de Andalucía, Juanma Moreno, y al consejero de Industria, Energía y Minas, Jorge Paradela. Imagen: Junta de Andalucía
Javier Escribano, presidente de Escribano Mechanical & Engineering (EM&E), ha consolidado su apuesta industrial en Andalucía tras recibir el visto bueno de la Junta a una subvención de casi 4 millones de euros para la ampliación de su centro de Córdoba.
Esta ayuda se suma a un esfuerzo inversor cercano a 130 millones en los últimos tres años junto con Indra, el otro gran grupo del que es accionista y directivo.
EM&E ha proyectado más de 48 millones de euros solo en Andalucía en este periodo, con nuevos centros en Córdoba y Jaén. Indra Group, presidida por Ángel Escribano, ha puesto sobre la mesa mientras tanto un plan de más de 80 millones para reforzar sus capacidades industriales y tecnológicas en la comunidad, generando más de 500 empleos.
El último paso ha llegado con la concesión de, específicamente, 3,8 millones de euros por parte de la Consejería de Industria, Energía y Minas de la Junta para implantar en su planta de Córdoba la actividad de fabricación de sistemas de armamento complejo para el sector de la defensa.
Todo esto ocurre en un momento convulso dentro de la Indra, de la que es presidente Ángel Escribano tras la salida de Marc Mutra. Una de sus primeras medidas, después de recibir apoyo económico del Gobierno en varios de sus proyectos, ha sido precisamente la de plantear la unión de EM&E, su empresa de origen, a la que ahora encabeza.
De momento, ambas compañías están manteniendo conversaciones formales para explorar dicha fusión. Y el consejo de administración de Indra, por su parte, ya ha autorizado el inicio de las negociaciones, aunque no se espera un acuerdo inminente.
Además, los hermanos Ángel y Javier Escribano, que controlan el 14,3% de Indra y el 100% de EM&E, se han comprometido a abstenerse en el proceso para garantizar la independencia del análisis. La eventual fusión permitiría a Indra integrar un fabricante de armamento puntero en su estructura, reforzando su papel como actor principal en la industria nacional de defensa.
Implantación
En la provincia cordobesa aterrizó en 2023 con plan para producir un lanzacohetes. En una primera fase, en 2023, comprometió 20 millones de euros, con la previsión de crear al menos 40 empleos a corto plazo y superar el centenar en menos de tres años.
La instalación se ha ubicado desde entonces en el Parque Científico Tecnológico de Córdoba, en un edificio adquirido en subasta por 2 millones. Las metas incluían desarrollar un kit de munición guiada y producir sistemas de portamortero embarcados, con actividad ya visible desde la primavera de 2024.
Y ahora la compañía ha anunciado una segunda fase con otros 18 millones para ampliar la capacidad de la planta, duplicar la plantilla hasta 200 trabajadores y alcanzar una superficie de 14.000 metros cuadrados.
Este centro cordobés será clave para el contrato de 700 millones de euros adjudicado por el Ministerio de Defensa al consorcio liderado por Escribano y Rheinmetall Expal para el lanzacohetes Silam, que dotará al Ejército de Tierra de un nuevo sistema de artillería moderna.
Asentamiento en Andalucía
Pero la planta de Córdoba no es el único foco de Escribano en Andalucía. En Linares (Jaén), ha puesto en marcha un proyecto enmarcado en el Parque Empresarial Santana que arrancará la producción a principios del año que viene.
La inversión inicial, de 10 millones de euros, permitirá fabricar vehículos militares en una nave de 13.000 metros cuadrados y prevé crear más de 150 empleos directos. El objetivo, según ha señalado la propia Escribano Mechanical & Engineering, es que estos modelos sean parte de un catálogo que se exporta a más de 25 países.
Por su parte, Indra ha presentado esta semana a la Junta de Andalucía un plan para duplicar su actividad en la región con una inversión de más de 80 millones de euros. La hoja de ruta prevé superar los 3.700 empleados como consecuencia la apertura de nuevas capacidades industriales y tecnológicas.
La multinacional ha subrayado que su apuesta andaluza busca reforzar la colaboración con universidades y centros de formación, activar el ecosistema local y atraer proyectos ligados al Ejército de Tierra, la Agencia Espacial Española y otros sectores estratégicos. En este contexto, ha incorporado a su grupo firmas como Deuser o Clue.