La dirección de Ficosa retrasa hasta marzo su comparecencia en el Parlament

La familia Pujol se escuda en los "acuerdos de confidencialidad" para retrasar el encuentro con la comisión de Empresa i Ocupació

Recibe nuestra newsletter diaria

O síguenos en nuestro  canal de Whatsapp

La familia Pujol irá al Parlament de Cataluña a dar explicaciones sobre la operación corporativa de Ficosa: la salida de sus socios fundadores, los Tarragó (que también son sus primos hermanos), y la entrada de Panasonic. El presidente de la empresa, Josep Maria Pujol, indica en una carta que envió a los miembros de la comisión de Empresa i Ocupació a principios de diciembre que tiene intención de «informar de los planes» de la compañía ante los diputados.

Eso sí, el presidente del grupo pide retrasar el encuentro como mínimo hasta marzo. Pujol alega «razones de confidencialidad» para no ofrecer información antes de esa fecha. Asegura que antes de explicar el proceso debe pasar el «closing con el socio inversor que esperamos ultimar en el primer trimestre del próximo año».

Visto bueno de los reguladores

La opinión mayoritaria de los miembros de la comisión es posponer el encuentro. Aunque no todos los implicados en este debate valoran del mismo modo la dilación que pide Pujol.

No en vano, el propio presidente de Ficosa admite en su misiva que la negociación ha concluido y que lo único que queda pendiente es recibir la «conformidad de las autoridades de la competencia en los diferentes países». La operación debe ser aceptada tanto por el regulador español como por el japonés, el país de origen de Panasonic. También indica que la persona más indicada para detallar la operación es el consejero delegado, su hijo Xavier Pujol, que ha liderado «el equipo que ha llevado a cabo toda la negociación».

Información a la plantilla

La cuestión que más preocupa a la plantilla y los grupos de la oposición es saber cómo se repartirá exactamente el capital en la futura compañía, tal y como manifestaron en una primera carta que remitieron a Pujol a finales de noviembre. La multinacional nipona desembolsará unos 150 millones por el 30% del capital del grupo. Otro 51% está en manos de los Pujol y el 20% es capital público.

Esa participación de la Generalitat es la que autoriza a la oposición a forzar la comparecencia de los dueños de Ficosa. Aunque lo habitual en una empresa privada con participación pública sería que fuera el Ejecutivo el que reclamara información.

Consejo de administración

El Govern de Atrur Mas ha optado por el perfil bajo en Ficosa. Incluso ha rechazado estar presente en el consejo de administración, en el que legalmente le corresponden dos representantes tras haber capitalizado varios créditos que mantenía con la sociedad.

Los empleados de Ficosa han criticado esta opción. Ahora, piden garantías para sus condiciones laborales ante los cambios organizativos que se formalizarán en el primer trimestre de 2015.

Recibe nuestra newsletter diaria

O síguenos en nuestro  canal de Whatsapp