Ignacio Sánchez Galán (Iberdrola) sobre el futuro de Almaraz: «Depende únicamente de la decisión del Gobierno»
La eléctrica cifra el impacto del apagón en sus cuentas en 180 millones y culpa a la falta de energía síncrona del incidente
El presidente de Iberdrola, Ignacio Galán
Iberdrola pone el balón en el tejado del Gobierno sobre la decisión de ampliar la vida útil de la central nuclear de Almaraz. El presidente de la eléctrica, Ignacio Sánchez Galán, ha sentenciado este martes que la prórroga «depende únicamente de la decisión del Gobierno», pese a que las propietarias de las instalaciones no han entregado aún la petición formal.
«Las plantas nucleares son seguras y necesarias. Probablemente se necesitan mucho más que antes pata evitar posibles apagones», ha destacado el presidente de Iberdrola durante la conferencia con analistas tras presentar los resultados de los nueve primeros meses de 2025.
En esta línea, Galán ha asegurado que las centrales españolas ya cuentan con licencias nacionales e internacionales para funcionar hasta 2030 sin necesidad de pedir más licencias, por o que a nivel técnico no hay ningún problema en seguir operando.
Además, el máximo ejecutivo de la energética ha destacado la «importancia» de estas centrales para la sociedad, destacando la «exigencia nacional y social» que existe actualmente para mantenerlas en funcionamiento.
Galán ha aludido a las manifestaciones de la sociedad civil que se han venido dando para tratar de frenar el cierre de Almaraz, así como al apoyo que la energía nuclear ha recibido por parte personas de partidos políticos diferentes. De igual modo, ha reiterado su posición acerca de la nuclear, asegurando que es «necesaria para mantener las luces encendidas».
Con este escenario, el presidente de Iberdrola ha recordado a los analistas que «las propietarias hemos pedido al Gobierno ampliar la vida de la central» y que ahora «depende únicamente de la decisión del Gobierno central» y «no hay ninguna otra limitación» para prorrogar su operación.
«Es la política del Gobierno. Tendrán que tomar la decisión y explicarán las consecuencias de lo que puedan hacer», ha sentenciado Galán.
Iberdrola, Endesa y Naturgy ultiman la petición formal
La semana pasada, Iberdrola, Endesa y Naturgy enviaron una carta al Ministerio para la Transición Ecológica que dirige Sara Aagesen en la que declaraban su «disposición» para ampliar la vida de Almaraz, una prórroga que se plantea de dos años, hasta 2030.
No obstante, a día de hoy no han enviado la petición formal concretando las condiciones en las que quieren mantener activa la planta. Se espera que lo hagan en los próximos días, al límite del plazo que establece el calendario.
Las tres eléctricas deben aprobar en el consejo del CNAT (Centrales Nucleares Almaraz-Trillo) dicha petición y luego enviarla al ministerio. Será entonces cuando el Gobierno decidirá si da el visto bueno a la propuesta o no.
Si hay luz verde, se entregará la documentación formal al Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) para prorrogar la utilización de las instalaciones. El plazo para solicitar la ampliación finaliza el próximo 1 de noviembre, dos años antes del plazo fijado para el apagón del primer reactor de la central extremeña.
No obstante, la propuesta tiene que cumplir con las tres líneas rojas que siempre ha marcado: que se garantice la seguridad de los ciudadanos desde una perspectiva radiológica, que no suponga un mayor coste para los ciudadanos y contribuyentes y que sea conveniente para garantizar la seguridad de suministro.
La fiscalidad ha sido el principal obstáculo hasta la fecha, si bien los problemas de tensión del sistema eléctrico y la incertidumbre sobre la seguridad de suministro se han erigido como argumentos a favor de mantener las nucleares al menos dos años más, hasta que se implanten por completo las medidas de control de tensión.
Iberdrola culpa del apagón a la falta de energía síncrona y
Respecto al apagón, el presidente de Iberdrola ha asegurado que la causa del incidente del pasado 28 de abril se debió «claramente» a la «falta de energía síncrona en el sistema», como según ha explicado coinciden diferentes informes y expertos que han participado en la comisión de investigación del Senado.
En esta línea, Galán ha señalado que Red Eléctrica “ha modificado la operación y está trabajando más con energía síncrona”. Se trata de la denominada operación reforzada, que depende más de los ciclos combinados de gas y genera un mayor coste para el sistema y también para Iberdrola.
La compañía ha cifrado en 180 millones los costes para sus cuentas hasta septiembre por la operación reforzada. Costes que asegura estar trasladando de forma paulatina a los clientes en sus contratos a medida que renuevan. Iberdrola confía en que el 70% se haya repercutido a los clientes en 2026 y que en 2028 se alcance el 90%.