La Xunta defiende su dispositivo contra los incendios: «El mejor de Europa»
La conselleira do Medio Rural, María José Gómez, defiende que la Xunta "no se rindió, ni se vio colapsada", pero se abre a la revisión de los protocolos antiincendios

María José Gómez, conselleira de Medio Rural, y Alfonso Rueda, en el puesto de mando avanzado de Quiroga / Xunta
La conselleira do Medio Rural se defiende de las críticas de la oposición por la ola de incendios. María José Gómez ha subrayado este miércoles que el dispositivo armado por la Xunta fue «el mejor de Europa«, si bien se ha mostrado abierta a acometer cambios de protocolos si es preciso y a trabajar para reforzar medios.
María José Gómez intervino en la Cámara gallega, en donde recibió invitaciones a dimitir por parte de Carmen Rodríguez Dacosta (PSdeG) y de Montserrat Valcárcel (BNG) -quien le ha instado a seguir «la receta» que el PP daba en 2006 al entonces responsable de Medio Rural, Alfredo Suárez Canal-. Gómez ha justificado que estuvo «al pie del cañón» y ha remarcado el carácter «excepcional» de una ola de incendios de la que, ha recordado, «hubo ministros que dijeron que no se podían apagar».
Como contraposición, Gómez ha recalcado que la Xunta «no se rindió, ni se vio colapsada». «En ningún momento hubo falta de medios», ha continuado, mientras la oposición le afeaba tener algunos «parados» por falta de personal o carencia de «formación». Dacosta ha aludido a los brigadistas que sufrieron quemaduras graves y ha afeado a la conselleira «enviar» a un joven de 18 años sin experiencia «a combatir un incendio de sexta generación».
En este sentido, Gómez ha defendido las «mejoras» en las condiciones de los efectivos de prevención y extinción, y ha contrapuesto la situación con lo que sucedía, ha agregado, en la gran ola de fuegos de 2006, cuando el bipartito de PSdeG y BNG dirigía el Gobierno. «Entonces sí que no pertenecían a la Xunta, sino que el servicio estaba en parte externalizado», ha dicho, antes de dar un dato: «desde 2009 se crearon 1.038 puestos más en brigadas».
«Y con condiciones laborales que no tienen nada que ver con el pasado. Pero no todo es personal, también se dio un salto cualitativo en medios y en innovación. Y se aumentó progresivamente la inversión para prevención, con una partida que ya supera este año los 50 millones», ha continuado, antes de matizar que, «pese a todo el esfuerzo humano y material», no se pudo «evitar una tragedia» como la vivida en agosto.
«Si hay que cambiar protocolos, también los cambiaremos»
«Lo sentimos profundamente, por supuesto que sí; y estamos dispuestos, como hicimos siempre, a analizar minuciosamente todo lo sucedido para aprender y garantizar que esta situación no se repita y de hacer lo posible para que nos encuentre mejor preparados», ha esgrimido, antes de abrirse a «hacer autocrítica».
«Si hay que cambiar protocolos, también los cambiaremos. Y si hay que seguir poniendo medios para la prevención y extinción, no les quepa duda de que, como anunció el presidente de la Xunta, se pondrán más medios», ha agregado la responsable de Medio Rural.
Frente a las acusaciones de «incompetencia», también ha vuelto a insistir en el papel de los incendiarios y en que lo vivido durante agosto fue «una situación excepcional» con fuegos «convectivos, alta simultaneidad e intencionalidad», especialmente en Ourense. En agosto se atendieron 673 incendios forestales, ha dicho, apagando de media entre 30 y 35 fuegos diarios.
Y tras el anuncio del presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, en la pasada jornada, relativo al convenio para la gestión de la biomasa en las franjas secundarias (las zonas más próximas a viviendas en las aldeas), firmado con la Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp) y Seaga, la conselleira ha ratificado que habrá mejoras.
Así, se reforzará el acuerdo y se ampliará la colaboración por parte del Gobierno autonómico para, entre otras cuestiones, ordenar la gestión de la biomasa en las franjas secundarias de las parroquias prioritarias en los ayuntamientos de menos de 10.000 habitantes.