Qué es y cómo funciona una cooperativa de viviendas

Es una asociación de personas que tienen en común la necesidad de una vivienda y participan en la compra, diseño y promoción de las mismas

Viviendas

Imagen de archivo de los trabajos de construcción de un bloque de viviendas

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Hasta no hace tanto existía la creencia de que las viviendas en régimen de cooperativa eran más baratas pero de peor calidad que el resto de obra nueva. Pero nunca ha sido así. En realidad, una cooperativa de viviendas no es más que una asociación de personas que tienen en común la necesidad de una vivienda y que participan en la compra del terreno y el diseño de la promoción.

Según explica la Gestora Navia B. I., “los propios socios o cooperativistas son quienes participan conjuntamente en el proceso de compra del terreno, diseño y desarrollo de la promoción, por lo que la figura del promotor desaparece, lo que quiere decir que, al eliminar intermediarios, se consigue una vivienda a precio de coste”.

Dicho de otra manera, adquirir una vivienda a través de una cooperativa implica que los socios deben decidir las calidades del inmueble, su distribución y tomar el resto de decisiones que sean necesarias para llevar a cabo su construcción.

Para que una persona pueda acceder a un piso construido en régimen de cooperativa es obligatorio carecer de vivienda en propiedad, contar con ingresos mínimos de 5.000 euros al año y un máximo de 5,5 veces el sueldo mínimo interprofesional.

Gestora Navia B.I. explica que está impulsando una gestora de cooperativa de viviendas en régimen de autopromoción, que “significará una alternativa dentro del mercado inmobiliario”. “Los cooperativistas podrán habitar sus viviendas con un esfuerzo económico menor del que invertirían si no estuvieran bajo esta fórmula asociativa”, destacan.

Las dificultades en el acceso a la vivienda

Las necesidades del mercado en Galicia invitan a la puesta en marcha de este tipo de fórmulas por la reducción del stock y la falta de obra nueva. De hecho, la Federación Galega de Empresas Inmobiliarias (Fegein) apuntó en un informe que la comunidad necesitaría 5.000 viviendas de protección oficial en régimen de arrendamiento para aliviar las actuales tensiones en el mercado, muy concentrado en las siete ciudades gallegas y sus áreas de influencia.

La patronal pedía “un plan de choque” que diese solución a las miles de familias que carecen del poder adquisitivo necesario para tener una vivienda en propiedad y que difícilmente pueden asumir un alquiler en el mercado libre. Y desglosaba las necesidades en cada área:

Pontevedra: 400 viviendas

Vigo: 2.000 viviendas

A Coruña: 1.200 viviendas

Ferrol: 200 viviendas

Santiago: 500 viviendas

Lugo: 400 viviendas

Ourense: 300 viviendas

Ferrol: 200 viviendas

Economía Digital Galicia

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