Sánchez asciende a Calviño y sustituye a Iglesias por Yolanda Díaz

La actual secretaria de Estado Ione Belarra sucede a Iglesias al frente del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, mientras el dirigente del PCE, Enrique Santiago, sustituye a Belarra.

Recibe nuestra newsletter diaria

O síguenos en nuestro  canal de Whatsapp

El presidente del Gobierno ha anunciado este martes el rediseño del Gobierno tras la salida del vicepresidente segundo, Pablo Iglesias. Pedro Sánchez premia a la vicepresidenta económica Nadia Calviño, que pasará a ocupar la cartera de Iglesias -Vicepresidencia Segunda- por encima de Yolanda Díaz que pasa a ocupar la Vicepresidencia Tercera.

Asimismo, la actual secretaria de Estado Ione Belarra sucederá a Iglesias al frente del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, mientras que el dirigente del PCE, Enrique Santiago, sustituirá a Belarra en su cargo. El presidente del Gobierno informó antes sobre estos cambios al Rey Felipe VI.

«Calviño, Díaz y Belarra son mujeres que han desempeñado una labor destacable. Una actitud constructiva. Han demostrado que la formula para los grandes consenso son la unidad y el diálogo», señaló Sánchez en su declaración institucional.

Se trata de la segunda vez en menos de dos meses que Pedro Sánchez tiene que afrontar una crisis de Gobierno. La primera fue por el lanzamiento del ex ministro de Sanidad, Salvador Illa, como candidato a las elecciones en Cataluña. Su lugar lo ocupa la ex ministra de Política Territorial y Función Pública, Carolina Darias, y el líder del PSC, Miquel Iceta, ocupó la cartera de Darias.

La vicepresidenta tercera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, interviene durante la sesión de control en el Congreso | EFE/JCH
La vicepresidenta tercera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, interviene durante la sesión de control en el Congreso. Foto: EFE/JCH

Con estos nuevos cambios puntuales, Sánchez premia a Calviño variando el orden para que sea la máxima responsable económica del Ejecutivo, por encima de Díaz. Un movimiento exigido por sus compañeros socialistas y al que la propia Díaz no se opuso, pese a las reticencias de Pablo Iglesias.

Por otro lado, el líder de Podemos coloca a una persona de su máxima confianza como es Ione Belarra, que hasta ahora era secretaria de Estado para la Agenda 2030. La dirigente ha pilotado algunas de las negociaciones más importantes con el PSOE, como fue la propia configuración de la coalición o, en estos momentos, la ley de Vivienda, donde las posiciones entre los socios están aún alejadas en cuanto a la regulación del alquiler.

Asimismo y como paso previo, el Consejo de Ministros también aprobó este martes el nombramiento de Enrique Santiago, dirigente del PCE que ocupará el actual cargo de Belarra, secretaria de Estado para la Agenda 2030. Una persona muy cercana a Iglesias que también ha estado pilotando negociaciones en la sombra y desde el Congreso de los Diputados.

Dar «estabilidad» y «confianza»

El presidente ha dado cuenta de estos cambios quirúrgicos mediante una declaración institucional. Las fuentes gubernamentales consultadas ya apuntaron que se trata de cubrir los puestos sin entrar a hacer una remodelación profunda. La idea es transmitir «estabilidad» y «confianza» a la ciudadanía porque, recalcan, que existe la firme de voluntad de agotar la legislatura.

La de este martes se convierte en la quinta crisis de Gobierno que Pedro Sánchez acomete desde que llegó a La Moncloa en junio de 2018, algunas motivadas por escándalos que afectaron a Máxim Huerta o Carmen Montón; mientras que otras fueron a causa de marchas como la salida de Josep Borrell, la de Salvador Illa y ahora la de Pablo Iglesias.

Sánchez habrá tenido 32 ministros en 34 meses como presidente. Pero su intención declarada es que la marcha de su hasta ahora vicepresidente segundo no altere en exceso la hoja de ruta marcada, que pasa por llegar a 2023 con la coalición intacta.

Pedro Sánchez en una foto de archivo del primer Consejo de Ministros. Foto: EFE

Fuentes gubernamentales aseguran a ED que, independientemente, de lo que suceda en los comicios madrileños del próximo 4 de mayo, «no va a haber un cambio de ruta que suponga alterar los objetivos que hay marcados», más si cabe cuando aún no hemos salido de la pandemia.

Los socialistas sueñan con llegar a las próximas generales con la economía ya recuperada tras completar los planes de vacunación y el aprovechamiento de un porcentaje importante de los fondos europeos de recuperación. Ese ‘salimos más reforzados’ también se lo aplican al partido y a los futuros resultados electorales con esperanzas de comerle terreno su socio de Gobierno, aunque tendrían que seguir contando con Podemos.

El Gobierno cambia el ‘chip’ de Iglesias y dejará atrás el airear las tensiones internas para trasmitir un mensaje de estabilidad que contrarreste el coste de contar con unos socios que se mueven en posiciones extremas. Sobre todo ahora que su candidato, Ángel Gabilondo, aspira a ganarse en Madrid al votante desencantado de Cs.

Comienza una nueva etapa sin Pablo Iglesias para el Gobierno de coalición y todos sus miembros esperan que la convivencia mejore para poder sacar adelante la hoja de ruta pactada entre las dos formaciones.

Recibe nuestra newsletter diaria

O síguenos en nuestro  canal de Whatsapp