De marca barata a marca de confianza: el sorprendente giro de Dia en su estrategia de marca blanca
La cadena de supermercados Dia ha dado el pistoletazo de salida al proyecto "Nueva Calidad Dia", que dará un lavado de cara a su marca propia

Un supermercado de la cadena DIA. Foto: Dia.
La cadena de supermercados Dia ha protagonizado en los últimos años una de las transformaciones más profundas del retail español, en un contexto marcado no solo por la inflación y los cambios en los hábitos de consumo, sino también en el cambio de hábitos por parte de los consumidores que ha dado un giro radical a la organización del retail.
Precisamente tras haber tenido en cuenta y valorado detenidamente estos factores, la compañía ha rediseñado su estrategia de proximidad para situar la confianza, el origen local y la calidad en el centro de su propuesta de valor, impulsando así una renovación completa de su marca blanca bajo el paraguas del proyecto “Nueva Calidad Dia”.
Dia protagoniza una gran transformación estratégica en el retail español
Ahora bien, este innovador proyecto no es solo una renovación de surtido, sino una estrategia integral de reposicionamiento que busca elevar los estándares de los productos propios y fortalecer la credibilidad de la enseña ante el cliente. En un mercado cada vez más competitivo, donde la marca del distribuidor ha ganado peso en la cesta de la compra, Dia ha apostado por convertir su marca blanca en un auténtico activo de diferenciación.
De hecho, durante los últimos meses la compañía ha llevado a cabo un profundo estudio de mercado, de la mano del cual ha identificado que los consumidores actuales valoran cada vez más la transparencia, la procedencia del producto y la confianza en el fabricante, factores que se integran de forma transversal en esta nueva etapa de la enseña.
En este sentido, el modelo de proximidad de Dia se sustenta sobre la colaboración con proveedores nacionales certificados, un pilar que refuerza tanto la economía local como la autenticidad de sus productos. Algo que, por otro lado, ya han puesto en práctica otras muchas cadenas del sector del retail en busca de brindar una mayor identidad a su producto propio.
En consecuencia, esta red de cooperación ha permitido a la compañía garantizar una trazabilidad completa, desde el origen hasta el lineal, un atributo especialmente relevante para un consumidor que busca productos más cercanos, sostenibles y de calidad contrastada, por lo que ahora la marca blanca de Dia va mucho más allá de ser una simple alternativa a las grandes marcas.
Tal y como explica Analía Blanco, directora de Compras de Productos Gran Consumo de Dia España, “la máxima calidad en cada producto ha sido el objetivo central de la transformación iniciada hace cinco años”. En este tiempo, Dia ha renovado más de 2.400 referencias, ajustando su catálogo a criterios de innovación, sostenibilidad y coherencia con las nuevas demandas del mercado.
Un compromiso con el producto natural que da lugar a una mayor percepción de su valor
La estrategia de la compañía, sin embargo, no solo tiene un efecto directo sobre la percepción del consumidor, sino también sobre la estructura productiva y económica del país. La apuesta por proveedores nacionales ha generado valor añadido en sectores clave como la agricultura, la industria alimentaria y el transporte, fortaleciendo así la cadena de suministro que sostiene el negocio de Dia.
Además, la compañía ha incrementado su inversión en productos de origen local, especialmente en categorías sensibles como la carne fresca, consolidando su compromiso con el producto nacional y también con el desarrollo regional. Esta política no solo impulsa la economía de proximidad, sino que también refuerza el vínculo emocional entre la marca y el cliente.
Precisamente teniendo en cuenta estos aspectos, el éxito de la estrategia se apoya en la implementación de rigurosos sistemas de control y certificación internacional, que garantizan la excelencia y la seguridad alimentaria. Dia ha alineado sus procesos con los estándares BRC, IFS y FSSC 22000, referencias globales en materia de calidad y trazabilidad.
Asimismo, la compañía ha desarrollado un Plan de Control Analítico orientado a la prevención del fraude, la seguridad alimentaria y la verificación de la calidad percibida por el consumidor. Este enfoque técnico y sistemático ha contribuido a consolidar un nuevo posicionamiento de marca propia, más sólido, coherente y competitivo dentro del mercado de la distribución.
Los resultados de esta transformación ya son visibles desde el mismo día en el que se implementaron: los productos Dia representan hoy una parte relevante de la cesta de la compra de los clientes de la compañía. La confianza y la satisfacción del consumidor se han incrementado de forma notable, un reflejo del impacto positivo que ha tenido el nuevo modelo de calidad y transparencia.
Desde entonces, para Dia, la marca blanca ha dejado de ser solo una cuestión de precio. La enseña la concibe ahora como una herramienta estratégica de fidelización, basada en la suma de factores como la accesibilidad, la calidad y la transparencia. “La fidelidad no se construye únicamente con un valor, sino con la suma de muchos factores”, subraya Analía Blanco, al describir la filosofía que guía la nueva etapa de la empresa.