Furia: dónde se rodó la serie española que arrasa en HBO Max

Madrid, con sus diferentes capas y estratos, es el escenario de los dramas de cinco mujeres en estado de furia

Madrid rico vs Madrid obrero en Furia. Foto: Jau Fornés | HBO Max.

Sin duda la serie del verano y una de las mejores de lo que llevamos de 2025, basta abrir la aplicación de HBO Max para encontrar Furia en el top de las más vistas. Y van semanas arrasando, concretamente desde el estreno el 11 de julio de sus dos primeros episodios.

Hoy disponible en 123 países, la última de los ocho entregas que integran esta primera temporada -ya se ha confirmado que habrá una segunda– llegó a la plataforma el 23 de agosto, pero ya en septiembre los dramas de cinco mujeres tan intensas como desesperadas siguen dominando el ranking y dando que hablar.

Extorsión, opresión, engaño, exclusión o manipulación son algunas de las situaciones que llevan al límite a las cinco protagonistas, interpretadas con enorme acierto por Carmen Machi (Marga), Candela Peña (Nat), Pilar Castro (Vera), Nathalie Poza (Adela) y Cecilia Roth (Victoria) hasta el punto de impresionar a The New York Times, que definió la serie como brillante y explosiva.

Sus conflictos, así como sus respectivas venganzas, conviven en un único universo y se desarrollan como un efecto mariposa, causando cada uno consecuencias en el siguiente. Así hasta desembocar en una catarsis compartida que arrastra por el camino a otros personajes, desde el marido infiel de Marga (Alberto San Juan) y la asistenta que espera un hijo suyo (Claudia Salas) a la familia del implacable casero que ahoga a Adela (Pepón Nieto) pasando por las nuevas compañeras que amenazan el puesto de Nat en los grandes almacenes de moda: Claudia Roset como Lu y Mima Riera como Megan.

Furia como estado vital

La serie, una comedia dramática escrita y dirigida por Félix Sabroso, retrata también la sociedad actual y el tiempo, furioso y “casi psicótico”, que vivimos, según explicaba en una entrevista en Cadena Ser.

“Tenemos tanto miedo y tanta rabia que se ha convertido en una forma de expresión y comunicación en la que la gente se siente cómoda y que representa su individualidad”, añadía.

Entre la ironía, el humor y la sátira, se deslizan temas candentes en la sociedad que van desde la gestación subrogada a los desahucios, pasando por el auge de los influencers, el choque generacional, el edadismo o el abismo de la diferencia de clases, con personajes privilegiados como los de Carmen Machi y Pilar Castro frente a los precarizados que interpretan Candela Peña y Nathalie Poza.

Mujeres al borde de un ataque de Furia. Foto: HBO Max.

Y, como la ropa, el estilo de vida o el botox del que echan mano las más pudientes, las localizaciones juegan un papel esencial para ilustrar la desigualdad. Urbanizaciones suntuosas y enormes jardines contrastan con barrios humildes y pisos patera; azoteas chic con bares de barrio; hoteles lujosos con sórdidos bingos.

Dónde se rodó Furia

Las dos caras de esta sociedad fracturada que retrata Furia se dan cita en Madrid, la ciudad que acoge la mayor parte de las localizaciones.

Es el caso de la casa de Marga, en la que trascurren muchas de las escenas. Se grabaron en una enorme vivienda unifamilar de arquitectura de vanguardia rodeada de piscina y jardines obra de los arquitectos Ignacio Vicens y José Antonio Ramos en la exclusiva urbanización de Las Matas. Conocida como Casa Manuel, la estructura, galardonada con el premio II BEAU de arquitectura, representa un juego de volúmenes que parecen brotar y hundirse en el suelo, con un acabado oxidado que le dan los enfoscados, chapas de acero y carpinterías.

Carmen Machi es Marga en Furia. Foto: HBO Max.

Tanto interiores como exteriores aparecen en la ficción, siempre con líneas rectas y espacios amplios y diáfanos, exquisitamente ordenados, cuya armonía rompen, quizás, las extravagantes esculturas de Marga y sus obsesivas prácticas de tiro. Unos espacios, señalan desde la productora, que «nos permitían poder generar una postal limpia, armoniosa y equilibrada».

En contraste con las urbanizaciones con metros de sobra y seguridad privada o los lujosos áticos en las que viven también la famosa cocinera Vera y el crítico gastronómico empeñado en hundir su carrera, interpretado por Pedro Casablanc, se encuentra el barrio de Adela y Nat, que representan a la clase trabajadora.

La primera a punto de perder la vivienda y la segunda el trabajo se cruzan en las calles de lo que en realidad es el madrileño barrio de Usera, con sus bloques de piso y pequeños parques sin césped. Una zona, consideran en la productora, que ejemplifica «la lucha diaria, las horas trabajando, los desahucios y el contrapunto de una misma ciudad».

El Madrid obrero se localizó en el bario de Usera. Foto: HBO Max.

También muy de barrio, el bar en el que Adela se toma un carajillo antes de su entrevista de trabajo está en Tetuán y en la realidad es Simal (calle de los Mártires de la Ventilla, 99).

Otro bar, en el que Nat y su compañera Rosa se toman una hamburguesa tras ejecutar su venganza, es la cafería Caracas, en Chamberí.

Las dos trabajan -o trabajaban- en unos grandes almacenes de firmas y grandes marcas que se recrearon en el hall del Teatro Nuevo Apolo, en pleno centro de Madrid (Plaza Tirso de Molina, 1), escogido, según la productora, por «su aire art decó californiano, donde la estructura de escalera cruzado y los acabados en mármoles con cortinaje rojo nos trasladan al ideario de espacio de moda y lujo».

Los grandes almacenes de moda se recrearon en el Teatro Nuevo Apolo. Foto: HBO Max.

De alfombras rojas a bingos

El capítulo dedicado a Victoria, una olvidada actriz del destape de los 70 engañada para creer que puede volver a la escena, se celebra una entrega de premios que se rodó en el hotel Hilton de la carretera de Barcelona, también en Madrid, junto al auditorio del teatro Goya.

También la vemos en el Bingo Las Vegas, que sigue abierto en el barrio de San Blas, «que dota de color y juego las escenas».

Cecilia Roth como Victoria en Furia. Foto: Jau Fornes | HBO Max.
Rooftop del hotel Hyatt Centric Gran Via Madrid. Foto: HBO Max.

Respecto a Vera, que protagoniza el cuarto episodio, las escenas en su piso se rodaron en una vivienda del Paseo de la Habana, pero también en un restaurante en la Torre Picasso y en el rooftop del Hotel Hyatt Centric Gran Vía Madrid, llamado el Jardín de Diana, «clásica vista con estatuaria de tejados, que corona un capítulo de localizaciones luminosas, modernas y de alto standing», explican los responsables de la serie.

En contraste, Lu y Megan, que representan a la juventud en la serie, viven sus propios dramas relacionados con el daño que puede causar el manejo de las redes pero también con los precios inalcanzables de la vivienda en las grandes capitales, nos adentramos en las calles de Malasaña, el Hostal Aguilar y una discoteca industrial que ayudan a retratar sus vidas.

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