Cinco rutas para descubrir Turquía en bici

Por valles y ciudades milenarias, por la increíble Estambul o la mágica Capadocia, recorremos Turquía de una forma más saludable y sostenible

Trayecto por Capadocia, una de las rutas que se pueden hacer en Turquía. Foto Turismo de Turquía

Quizás Turquía no tenga tantos circuitos señalizados y una cantidad de infraestructuras adaptadas para ciclistas, pero muchas personas prefieren esta forma más agreste de descubrir un país en dos ruedas.

Sin embargo este país euroasiático está avanzando rápidamente en brindar servicios a los amantes de las dos ruedas, con la puesta en marcha del certificado Bicycle Friendly Accommodation Facilites, que se otorga a los alojamientos que tienen las comodidades y equipamientos necesarios a los que hagan cicloturismo.

Capadocia

Según las sugerencias de Turismo de Turquía (o Türkiye, como ahora se promocionan) una de las rutas es la que va por el valle de Güvercinlik al Museo al Aire Libre de Göreme.

Estamos en Capadocia, el valle de la región de Anatolia donde se elevan rocas de formas caprichosas y cuyo subsuelo fue excavado durante milenios por pueblos antiguos.

Salida por el Museo al Aire Libre de Göreme. Foto Turismo de Turquía

Aquí se despliegan siete rutas, de las que destaca la que comienza en el Castillo de Üçhisar a Göreme, la localidad más turística de la región.

El primer punto está coronado por una roca gigantesca donde desde hace siglos viven personas, y que al ascender a la cima se obtienen hermosas panorámicas.

Tras el museo de Göreme, una inmensa concentración de chimeneas y otras rocas que parecen setas gigantes el camino transcurre por el valle de Meskendir y el pueblo de Çavuşin.

Esta última parte es conocida como el valle de las palomas, y cuando se pedalea y se siente el arrullo de estas aves, se comprende el nombre.

Vía Licia

Al suroeste de Turquía se extiende la Vía Licia, antiguo camino romano de 500 km de largo que bordea la costa mediterránea.

En Capadocia se pedalea entre las rocas de formas caprichosas, como setas pétreas, que se elevan en el Museo al Aire Libre de Göreme

En su trazado se suceden maravillas naturales como el valle de las Mariposas, la montaña de Olympo, el cañón de Göynük, la península de Fethiye, los balnearios de Kalkan y Ölüdeniz yla bahía de Kabak, entre otros atractivos.

Excursión por el monte Olympos. Foto Turismo de Turquía

Uno de los caminos que se pueden hacer es el sendero de 18 kilómetros, pensado para bicicletas de montaña, que permite llegar a la playa de Maden, cerca de Antalya.

En esta bahía se pueden realizar actividades como senderismo, buceo y excursiones a cuevas.

Éfeso

En cada rincón de Turquía hay rastros de historia, sea antigua, medieval o moderna. Para los amantes de la primera se puede hacer la ruta que va desde Éfeso a la Casa de la Virgen María.

El punto de partida está en las ruinas del templo de Artemisa, construido en el siglo VI a.C. y considerada como una de las maravillas de la antigüedad.

Es una ruta de cinco kilómetros que desciende desde los 414 metros hasta los 350 metros, en un trazado que es mejor hacerlo en bicicleta eléctrica o de montaña.

Ruinas de İzmir. Foto Turismo de Turquía

La llegada es la llamada Casa de la Virgen María, a nueve kilómetros de Selçuk, donde según la tradición cristiana la madre de Jesús se refugió de las persecuciones y tras morir ascendió al cielo.

Muğla

A mitad de camino entre Esmirna y Antalya está la región de Muğla, cuyo litoral está plagado de resorts turísticos como Bodrum o Marmaris que aprovechan las bellezas naturales del Egeo.

Para los amantes de la historia antigua se puede hacer el trayecto desde el templo de Artemisa, en Éfeso, a la casa de la Virgen María, cerca de Selçuk

Allí se pueden hacer una serie de rutas en su exuberante naturaleza, como los 15 senderos que se diseñaron para bicicletas de montaña y otros siete para eléctricas.

Paisaje de Muğla. Foto Turismo de Turquía

Estas rutas permiten llegar al centro del distrito de Ortaca, el arroyo Dalaman, las playas de İztuzu o Sarıgerme, zona protegida porque es zona de desove de las tortugas caretta caretta.

Estambul

La ciudad de los dos continentes, fascinante e inconmesurable, Estambul tiene zonas de un tránsito endiablado, poco recomendado para andar en bicicleta.

Pero hay bosques de la parte europea que sí cuentan con senderos adaptados para andar en dos ruedas, sean de carretera o eléctricas.

Estos también transitan por la costa de Europa a lo largo de las aguas del Bósforo.

En bicicleta por Estambul. Foto Turismo de Turquía

Por ejemplo, uno de los paseos es el que va desde la margen europea de este estrecho hasta el Bosque de Belgrado, que se considera como el pulmón de la ciudad.

Otra opción, en la cara asiática, es ir desde el distrito de Tuzla hacia Sahil, en un recorrido que en gran parte se hace por bicisendas, con el Mar de Mármara a un lado.

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