Siete vinos para disfrutar con la uva garnacha negra
Estos vinos fueron protagonistas de una cata-coloquio del encuentro de bodegas y productores Magnificat, excelentes muestras de la calidad que se puede lograr con esta uva
La garnacha, una uva capaz de dar grandes vinos, frescos y aromáticos
La última edición del Magnificat, encuentro de grandes bodegas con más de 1.800 profesionales del sector, celebró un capítulo muy especial de catas centrado en una de las variedades que era poco valorada y hoy produce grandes vinos: la garnacha.
La cata-coloquio, llamada ‘Un viaje por la historia de la garnacha, desde el Mediterráneo hasta el Nuevo Mundo’, estaba protagonizado por algunos de sus mejores elaboradores a nivel mundial.
Entre otros se encontraban Joan Àngel Lliberia (Edetària), Sara Pérez (Mas Martinet), René Barbier (Venus La Universal), Marc Bournazeau (Terra Remota), Joan Asens (Orto Vins), Telmo Rodríguez (Pegaso) y Maxime Chapoutier (Maxime Chapoutier).
Todos ellos explicaron como entienden la garnacha a través de sus vinos, y de ese debate destacamos estos productos monovarietales a base de esa uva.
Finca La Personal 2018
De la DO Terra Alta, compuesto por un 100% de garnacha peluda, procedente de viñedos de más de 60 años en un suelo pedregoso antiguo lecho de río, y con una crianza de ocho meses en roble francés.
La garnacha era una variedad poco valorada y ahora es productora de vinos inolvidables
Esta garnacha se adapta muy bien a veranos calurosos y secos del Mediterráneo, con unas vellosidades que posibilita vinos frescos con aromas de frutos rojos, frutos del bosque, hierbas y balsámicos. Posee una gran estructura salvaje pero un final largo y elegante.
Els Escurçons 2018
De la bodega Mas Martinet, DOQ Priorat. Es un vino compuesto por un 100% de garnacha negra, procedente de viñedos de suelos de licorella ferruginosa y con una crianza de ocho meses en ánforas de arcilla de Miravet y 12 meses en damajuanas.
El suelo de licorella de Gratallops, la altura de 601 metros y la exposición al sur-suroeste le dan una sensación de “fragilidad etérea, mineralidad y contundente madurez”.
“Es un viaje en el tiempo, un reflejo de vino elaborado antes de la filoxera” dicen sus productores, sin fruta y muy especiado,
Venus La Figuera 2018
De Venus La Universal, DO Montsant. Es un vino compuesto por un 100% de garnacha negra, procedente de viñedos con orientación al Mediterráneo, en suelos graníticos y con agricultura orgánica más la intervención de la Tramuntana, y con una crianza en ánfora y fudre de 2.500 litros durante 18 meses.
Presentado como un “proyecto único y mágico que busca la feminidad y la tierra”, es un vino muy fino, poco estructurado pero con una acidez muy pronunciada, fresco y muy elegante.
Gg 2020
De la bodega Terra Remota, DO Empordà. Estamos ante un vino ecológico con un 100% de garnacha negra, procedente de viñedos con orientación al Mediterráneo, en suelos graníticos y con agricultura orgánica donde interviene y mucho la Tramontana.
Els Escurçons se presenta como “un reflejo de vino elaborado antes de la filoxera”
Con una crianza de seis meses en huevos de hormigón que permiten auto fermentación y auto crianza logrando la máxima expresión varietal, redondeando taninos y manteniendo frescura aromática; recuerda a frambuesa, cereza, flores y hierba recién cortada. En boca es sedoso, seductor y presenta taninos maduros.
Palell 2018
De Orto Vins, también DO Montsant. Es un vino orgánico y biodinámico compuesto por un 100% de garnacha peluda que procede de viñedos en suelos arcillosos, y con fermentación en barricas y una crianza de 12 meses en roble francés.
Esta garnacha, que se adapta a los veranos calurosos y secos del Mediterráneo, en esta ocasión lo ha hecho en un año lluvioso y frío. Se trata de un vino fresco, jugoso, aromático y que presenta un color muy seductor.
Granito 2018
De Pegaso Viñas Viejas, DOP Cebreros de Castilla y León. Vino compuesto por un 100% de garnacha negra, procedente de viñedos en suelos someros de origen magmático de textura gruesa y mucho drenaje con una altitud de entre 800 y 1.000 metros, y con una crianza de 18-24 meses en roble francés.
Los vinos procedentes de granito como est, son muy afrutados, sedosos, elegantes y delicados
Châteauneuf-du-Pape Barbe Rac 2015
De M. Chapoutier, con la Appellation Châteauneuf-du-Pape Contrôlée, del Valle del Ródano, Francia.
Es un vino biodinámico compuesto por un 100% de garnacha negra, procedente de viñedos de más de 90 años en un suelo pedregoso antiguo lecho del Ródano y con una crianza de 16 meses en cubas.
Aromáticamente es herbáceo, especiado, frutal (fresas), y tiene chocolate y regaliz. En boca es amplio, carnoso, caliente y redondo con una densidad excepcional. Tiene una increíble guarda de entre 30 y 75 años (según añada).
Jordi Català. Periodista, infografista, comunicador visual, historiador, diseñador y casi arquitecto. Especialista en gastronomía, vinos, destilados y habanos. Creador de TOI y de las CatasVisuales. Dirigió Infografía en El Periódico de Catalunya 24 años. Es infografista del GT del Liceu y profesor en la UAB, UViC, EINA y en CPC.
