El mejor whisky español es vasco

El Bikkun Vatted Malt fue elegido como el mejor whisky por la revista más prestigiosa del sector. Elaborado por la microdestilería Basque Moonshiners, se puede combinar con estos seis cócteles

PORTADA FOTO- Versatilidad de un whisky de turba. Pexels Olena Bohovyk

El mejor whisky español se hace en el País Vasco. Así lo dictaminó la revista Whisky Magazine, la publicación más importante del mundo dedicada a esta bebida.

Se trata del Bikkun Vatted Malt Whisky, elegido como Best Spanish Blended Malt 2022, donde el jurado destacó su elaboración artesanal (catted) y el ensamblado de malta ahumada de las islas escocesas con malta 100% originaria de las tierras vascas.

Infografía: Jordi Català

Bikkun (de Bikuna o Biguna) significa en euskera ‘algo que se hace entre dos’, o sea en pareja.

Parece que el dos es el número que acompaña a este Bikkun, pues es un whisky 100% de malta y 46% de volumen que surge de la mezcla de maltas surgida de la colaboración entre la microdestilería de Vitoria, Basque Moonshiners y Distell International.

Esta es conocida por ser la casa madre de varias destilerías escocesas de primer nivel, con productos como Deanston, LedaigBunnahabhain, muy conocidos entre los amantes del scotch.

Cómo se elabora el whisky vasco

Para crear este excelente whisky se ha utilizado malta ahumada de Islay (Bunnahabhain), además de malta con marcado carácter sherry ajerezado de las Highlands (Deanston), todos ellos escoceses.

La revista Whisky Magazine eligió al Bikkun Vatted Malt Whisky como el mejor de España

Este se complementa con una mezcla del ya característico single malt de Basque Moonshiners añejado en barricas de roble de la Rioja Alavesa, como el primer whisky que nació en esta factoría vasca, el premiadísimo Agot Single Malt Basque Whisky.

Para José Luis Navarro, director de la microdestilería alavesa, este premio significa “un reconocimiento a un trabajo de años apostando por autenticidad y calidad”.

Además no es el primer reconocimiento. “Tras el premio obtenido hace dos años con Agot Single Malt Basque Whisky, nos parece increíble que nos hayan vuelto a valorar con el mismo galardón”, dijo Navarro.

Los orígenes

Antonello Favro, un partisano italiano que combatió con los republicanos en la Guerra Civil, enseñó a Tomás Ortiz de Zarate a destilar vodka.

Este era el abuelo del actual maestro destilador Juan Carlos Ortiz de Zarate. Para crear la que sería -quizás- el primer vodka vasco, que aprovechó la abundante patata del lugar, de la variedad agria, sabrosa y muy rica en almidón.

El joven maestro destilador Juan Carlos Ortiz de Zarate con sus amigos José Luis Navarro (actual director comercial) y Eduardo Martínez de Murguía (a cargo del marketing) vivían en el pueblo alavés de Fontecha.

Un día encontraron en el granero del abuelo de Juan Carlos un pequeño alambique de cobre que durante 70 años se había utilizado para destilar.

Los tres jóvenes lo recuperaron para hacer licores caseros en sus ratos libres mientras aprendían a destilar a la luz de la luna, entre cazuelas y pucheros. 

La actualidad

En 2014 abrieron la destilería Basque Moonshiners y Basmoon Vodka, su seña de identidad, que pasaba a convertirse a gran velocidad en una de las primeras microdestilerías españolas.

El nombre homenajea a los moonshiner de EEUU, personas que desafiaban la Ley Seca, productores clandestinos que elaboraban destilados con cazuelas de hojalata y viejos alambiques de cobre al aire libre.

Como dice José Luis Navarro “disfrutar de las cosas buenas exige correr un riesgo”.

José-Luis-Navarro-da-a-catar-al-Maestro-Destilador-Juan-Carlos-Ortiz-de-Zarate-su-primer-whisky-Agot-Foto-Basque-Moonshiners
José Luis Navarro da a catar al Maestro Destilador Juan Carlos Ortiz de Zarate su primer whisky Agot. Foto: Basque Moonshiners.

Para continuar la tradición vasca de producir licores domésticos como el patxarán, los Basque Moonshiners decidieron diseñar un camino nuevo con destilados de envergadura.

Basmoon Vodka fue su primera creación y el resultado de una receta mejorada a lo largo de años, un vodka premium de cinco destilaciones de patata.

Disfrutar de las cosas buenas exige correr un riesgo.

Juan Carlos Navarro

Al equipo Moonshiners se incorporó uno de los bartenders más importantes del País Vasco, Manu Iturregi, propietario de Residence Café (Barrainkua Bilbao), uno de los bares con más referencias en rotación de whiskys de España.

Manu Iturregi, el famoso bastender de Bilbao, alma de Basque Moonshiners. Foto- YoutubeManu Iturregi, el famoso bastender de Bilbao, alma de Basque Moonshiners. Foto- Youtube
Manu Iturregi, el famoso bartender de Bilbao, alma de Basque Moonshiners. Foto: Youtube

Seis cócteles para disfrutar Bikkum

John Collins:  b en su famoso The fine art of mixing drinks relata que esta bebida se servía con limonada con ginebra preparada por Tom y John Collins, un bartender en New York.

Con el tiempo la receta cambió, y actualmente se sirve con whisky o con vodka, que acompañan muy bien a la refrescante limonada. 

Café irlandés: bebida que proviene de la tierra de los duendecillos verdes. Nace en Foynes Port (base aérea), famosa por ser visitada por estrellas de Hollywood. 

Una noche muy fría del 1943, el cocinero Joe Sheridan decidió crear algo diferente para sus cansados huéspedes, que llegaban con el cuerpo helado. 

Infografia Jordi Català
Infografía: Jordi Català

Old Fashioned: un clásico de la coctelería, su invención data aproximadamente de 1931, cuando el coronel James Pepper, dueño de Old 1776 Whiskey, la preparó por primera vez. Es un trago sencillo, refrescante y fuerte, pero agradable al paladar.

Manhattan: el Dr. Lain Marshall lo creó en 1870. La historia cuenta que Jennie Jerome (Lady Randolph) preparó un banquete para el candidato presidencial Samuel J, Tilden y buscó una bebida especial para recibirlo.

La sorpresa fue que todos quedaron encantados y la bebida rápidamente se popularizo como “el cóctel de Manhattan”. Es aperitivo, pero por su nivel de alcohol, es preferible tras la comida 

Infografía: Jordi Català

Whisky Sour: en 1962, la Universidad de Cuyo publicó que Elliot Stubb creó esta fascinante bebida alrededor del año 1872. Su lugar de origen fue Chile, en el puerto de Iquique, que significa ‘lugar de descanso’.

Rusty Nail: perfecto como digestivo por sus sabores aromáticos y su alcohol moderado, fue una de las bebidas más glorificadas de los ‘50 en Hollywood.

Preparando un Rusty Nail. Foto- Adam Jaime. Unsplash
Preparando un Rusty Nail. Foto: Adam Jaime.

No se conoce su etimología: algunos dicen que su nombre se tomó prestado de una serie de TV, otros que originalmente se agitaba con un clavo oxidado.

Se le atribuye su invención al Club 21, por lo que sería como un primo del cóctel icónico de la Gran Manzana: el Manhattan.

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