El Consell reivindica la «estabilidad institucional» y el «liderazgo» en la reconstrucción
"El gobierno de Carlos Mazón reafirma su compromiso con una Comunitat Valenciana más próspera, justa y dinámica, demostrando que es posible gobernar con eficacia, cercanía y visión de futuro"

Susana Camarero (izq.) y Ruth Merino (der.), en rueda de prensa tras el pleno del Consell de la Generalitat.
El Consell reivindica esta semana, cuando se cumplen dos años desde el inicio de la legislatura, la «estabilidad institucional» de haber aprobado dos presupuestos consecutivos y su «compromiso con los valencianos». Considera que está avanzando en su hoja de ruta y «liderando la recuperación social y económica» tras la dana del 29 de octubre.
«El gobierno de Carlos Mazón reafirma su compromiso con una Comunitat Valenciana más próspera, justa y dinámica, demostrando que es posible gobernar con eficacia, cercanía y visión de futuro», manifiestan desde el ejecutivo autonómico.
Como balance, aseguran haber cumplido con sus principales compromisos en el ecuador de la legislatura, «consolidando un modelo de gestión basado en la responsabilidad y la eficiencia que ha puesto en el centro de toda su estrategia el bienestar de los ciudadanos, con inversiones históricas en gasto social».
Según afirman, Mazón ha garantizado «estabilidad institucional» al haber sacado adelante dos presupuestos, «garantizando el funcionamiento de los servicios públicos esenciales y priorizando la sanidad, los servicios sociales y la educación«. «Frente a la parálisis presupuestaria del Gobierno, la Generalitat ha demostrado que es posible gobernar con responsabilidad, rigor y una hoja de ruta clara», aseveran.
Entre las medidas impulsadas, desde el Consell destacan el compromiso «ambicioso» de la gratuidad de la educación 0-3 años, el refuerzo de la «libertad educativa», el Plan de Salud Mental, la Estrategia de Salud Digital, proyectos como el centro de protonterapia, la reducción «histórica» de las listas de espera en dependencia, el incremento de las plazas públicas de residencias de mayores.
También el «ambicioso» Plan Simplifica en la administración, que aseguran que ha contribuido a la captación de inversiones por valor de casi 10.000 millones de euros, o la «profunda» reforma fiscal con la supresión del impuesto de sucesiones y donaciones y una política «claramente orientada a las rentas medias y bajas» que ha permitido que el total de beneficiarios de deducciones autonómicas en el IRPF «se dispare un 88%, alcanzando 567.951 contribuyentes y generando un ahorro anual de 185 millones de euros«.
Desde el Consell resaltan la apuesta por «una política de vivienda activa, con el Plan Vive, que prevé la creación de 10.000 viviendas públicas, ayudas al alquiler, rebajas fiscales para jóvenes y colectivos vulnerables y un programa de avales para la compra de la primera vivienda por parte de jóvenes, que ha beneficiado en su primer año de vigencia a casi 1.500 personas».
Otros hitos que repasan son «el desbloqueo de infraestructuras clave en las tres provincias, la aprobación de la primera Ley de Protección y Ordenación de la Costa, el respaldo al sector primario la reindustrialización del tejido productivo, la modernización de la justicia y la mejora de la atención ciudadana».
Reconstrucción
Toda una estrategia, exponen, que «discurre de forma paralela y complementaria con la ingente tarea de reconstrucción de las zonas afectadas por la riada del 29 de octubre en la provincia de Valencia». Según apuntan, el Consell ha movilizado, comprometido o gestionado partidas por 2.422,83 millones de euros entre contratos de emergencia, dotación para ayudas directas y otras actuaciones.
La Generalitat ha presentado el Pla Endavant, con 339 medidas y 12 objetivos estructurales para acelerar la reconstrucción, planificar infraestructuras estratégicas y reforzar a la Comunitat ante emergencias. Este plan pivota sobre cuatro áreas: infraestructuras, prevención, protección y gestión de las emergencias para transformar la Comunitat con la finalidad de que esté más preparada ante catástrofes naturales.
Hasta ahora, los trabajos de reconstrucción han supuesto la limpieza de 900 garajes y 56 centros educativos, la retirada de casi un millón de toneladas de residuos y su correspondiente tratamiento y 330.824 horas de trabajo de personal administrativo, personas encargadas, oficiales y de otros perfiles técnicos, que se suman a las 180.353 horas de trabajo de maquinaria para la reconstrucción. También se han reparado 650 kilómetros de carreteras de la Generalitat y Diputació de València y 566 kilómetros de vías de ferrocarril y metro, y se ha recuperado de forma total el servicio de Metrovalencia.
Además, se han recuperado de forma total o parcial de más de cien centros educativos, se ha realojado a más de 48.000 alumnos de educación Infantil, Primaria y Secundaria y se han reactivado 61 centros de salud y tres hospitales, 421 farmacias con daños y 126 residencias para mayores y centros sociales, 55.000 hectáreas de cultivo y 50.000 parcelas y 122 depuradoras y colectores.
«Y todo ello se ha logrado sin recibir ayudas a fondo perdido por parte del Gobierno central y a pesar de la infrafinanciación estructural que sufre la Comunitat, la peor tratada por el actual sistema de financiación autonómica, y pese a la deslealtad institucional del Gobierno de España, que ha desatendido de forma sistemática las demandas en materia hídrica, de financiación, de inversiones y de infraestructuras realizadas por el Consell», añaden.
Y argumentan: «El Gobierno central, lejos de respaldar a los valencianos, ha desarrollado una estrategia de asfixia financiera que ha acabado con una situación inédita, obligando a la Generalitat a solicitar deuda extraordinaria para poder pagar a proveedores, después de que, por primera vez en 12 años y sin justificación alguna, se haya eliminado el extra-FLA (Fondo de Liquidez Autonómica) destinado a cubrir las desviaciones de déficit de las comunidades infrafinanciadas. Este hecho inaudito se produce en el peor momento de nuestra historia reciente, tras una catástrofe natural sin precedentes».