El Sepe solo colocó a 185.000 personas el año pasado, el 4,25% de los demandantes de empleo

Los servicios públicos apenas encontraron trabajo a 4 de cada 100 registrados en las oficinas de empleo, a la espera de que el SEPE se convierta en Agencia Estatal

La vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz (d), conversa con la diputada y candidata de Sumar a la Presidencia de la Xunta, Marta Lois. EFE/ J.J. Guillén

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Los servicios públicos de empleo apenas colocaron a 185.000 demandantes de empleo en 2023 gracias a su mediación, de acuerdo con los datos públicos a nivel estatal, lo que representa un 4,25% de la media de registrados en las oficinas del SEPE durante todo el año anterior.

La mediación de los servicios estatales de empleo ha sido muy puesta en cuestión tanto por la patronal como los sindicatos, que critican la falta de resultados del SEPE. A la luz de los datos, los resultados del año pasado dejaron mucho que desear. Las colocaciones registradas en el Servicio Público de Empleo Estatal con oferta previa en sus oficinas fueron, en total, 185.897 en 2023. En promedio, los demandantes de empleo (la cifra incluye, además del paro registrado, a la gente ocupada que busca cambiar de trabajo o en circunstancias especiales) fueron 4.374.423.

Es decir, solo cuatro de cada cien registrados en las oficinas de empleo pudieron encontrar trabajo el año pasado gracias a una candidatura presentada a través de estos servicios, que incluye a los autonómicos.

Trabajo defiende la «labor heroica» de los funcionarios de empleo

El secretario de Estado de Trabajo, Joaquín Pérez Rey, puso en valor este jueves, durante unas jornadas de empleo organizadas por UGT donde se debatía sobre estos servicios públicos, la tarea y la «labor heroica» de los funcionarios del SEPE. De hecho, aseveró que en los seis meses posteriores a la intervención de los servicios de empleo, un millón de esos trabajadores han encontrado un empleo indefinido.

Sin embargo, la realidad es que a ambos lados del diálogo social se reclama una mejora que la Ley de Empleo, publicada el pasado año, no ha supuesto. Permitir itinerarios personalizados, atención concreta, formación al desempleado… Razones por las cuales el SEPE se iba a reconvertir en la Agencia Estatal del Empleo, como contempla la norma.

Fuentes de Trabajo, cuestionadas por el estado de esta reconversión, han detallado que será «pronto» y que los trabajos se vieron demorados por el adelanto electoral y el periodo en funciones. Igualmente se retomarán una serie de mesas de diálogo social con sindicatos y patronal para, entre otras cuestiones, desarrollar el artículo 15 de la Ley de Empleo en lo referente a las personas LGTBI en los entornos de trabajo.

Patronal y sindicatos reclaman mejoras

Hasta entonces los sindicatos reclaman más recursos en las políticas activas de empleo para neutralizar el desempleo estructural que se ceba con los mayores de 45 años, sobre todo. De acuerdo con un estudio del sindicato UGT presentado este mismo jueves, España queda muy rezagada no solo en gasto en proporción al producto interior bruto (PIB), sino también en gasto por cada punto de paro. Países como Alemania, Bélgica o Suecia gastan diez veces más por cada punto porcentual de desempleo, con España siendo el farolillo rojo a nivel europeo en esta materia.

«Si el sistema no evoluciona, la simple Ley de Empleo no va a solucionar los problemas porque muchos de esos programas no son eficaces, están desfasados», criticó la secretaria de de Política Institucional y Políticas Territoriales del sindicato, Cristina Estévez, que puso como ejemplo cursos del paro de inglés destinados a bomberos forestales o a trabajadoras de ayuda a domicilio.

La patronal también lleva tiempo cuestionando estos servicios a cuenta de la falta de empleados para posiciones claves, las vacantes que, dicen los empresarios, están suponiendo ya un grave problema para la productividad del tejido productivo. Empresas y autónomos coinciden: cada vez es más complicado encontrar a trabajadores para los puestos que requieren.

«El SEPE no contribuye todo lo que podría a aliviar esta situación del mercado laboral, pues sus resultados a la hora de intermediar en la colocación no son lo exitosos que sería deseable: apenas logra colocar a menos del 5% de inscritos como demandantes de empleo», denunció a la vuelta del verano la patronal de la pequeña y mediana empresa

Desde el Ministerio de Trabajo niegan la mayor y el ‘número dos’ de Yolanda Díaz insistió en que el asunto no es de falta de trabajadores: «Es de condicionales laborales», dijo rotundo. «En España no hay problema de vacantes. Somos el país a la cola de Europa en puestos de trabajo disponibles y la mayoría de esos puestos de trabajo disponibles, las vacantes, curiosamente se concentran en el sector público y no en el privado», afirmó. «Hay que procurar condiciones de trabajo adecuadas y se resolverá de un plumazo el problema de las vacantes», zanjó.

A la espera de que se cumpla la promesa de Yolanda Díaz -en junio de 2022 se dio medio año para culminar la Agencia del Empleo-, un artículo de Funcas publicado en los últimos meses apunta a la posible razón del mal funcionamiento de los servicios de empleo: «El reparto competencial puede estar detrás de que ni la activación ni la modernización de los sistemas públicos de empleo (SPE) haya sido satisfactoria. Con independencia de que la escasez de mano de obra y las vacantes sean cuestiones complejas, su reciente protagonismo hace que la coordinación de las políticas activas y pasivas de empleo y, muy especialmente, la reforma y modernización de los SPE y de las PAE, sean asignaturas pendientes que no pueden continuar posponiéndose», advierte el documento.

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