España solo tiene un tercio de los puntos de recarga de coche eléctricos previstos para final de año

En 2022, se han instalado 3.154 puntos de carga hasta tener 16.566, lejos de las 45.000 marcados como objetivo por el Gobierno y por Europa

Una zona de cargadores para vehículos eléctricos en un aparcamiento público de Madrid. EFE/Chema Moya

Recibe nuestra newsletter diaria

O síguenos en nuestro  canal de Whatsapp

A pocas semanas de finalizar el 2022, ya se puede afirmar que España no cumplirá los objetivos para la transición energética, al menos no en términos de movilidad eléctrica por el lento despliegue de los puntos de recarga públicos. Las cifras hablan por sí solas: en el país hay instaladas solo un tercio de las 45.000 infraestructuras necesarias para avanzar hacia la movilidad sostenible estipuladas en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) del Gobierno y por la Unión Europea.

Según datos de Anfac, la patronal que agrupa los grandes fabricantes automovilísticos, solo se han instalado 3.154 puntos en lo que va de año, hasta configurar una red de 16.566. 2022 partía con 13.411 estaciones repartidas por toda la nación, de modo que solo se han construido el 10% de las casi 32.000 necesarias para llegar a estas ansiadas 45.000, que supondrían el cumplimento de los objetivos energéticos.

La infraestructura de recarga de acceso público ha aumentado en 793 puntos en el tercer trimestre de 2022, lo que supone una desaceleración del ritmo estirado hasta el segundo trimestre. De no apretar el acelerador, España seguirá suspendiendo en los años venideros. El objetivo para reducir las emisiones contaminantes es contar con 110.000 puntos en 2025 y llegar hasta los 340.00 en 2030. La infraestructura actual representa un 3% y un 1% de estas metas respectivamente.

Además, Anfac denuncia en un reciente comunicado que existe un número significativo de puntos que, por no funcionar o por no ser de acceso público, se han suprimido en la última actualización de su base de datos.

De los 793 nuevos puntos de recarga instalados, 418 corresponden a potencias de hasta 22 kW, es decir, de carga lenta. A pesar de la evolución, la red nacional de puntos de recarga continúa siendo mayoritariamente de esta tipología, representando el 81% del total de la infraestructura. En el último trimestre, se han instalado un total de 307 nuevos puntos de recarga por encima de los 50 kW, asociados a la carga rápida con tiempos inferiores a los 40 minutos. En este sentido, el 89% de los puntos de recarga de acceso público de alta potencia responde a proyectos de fabricantes de automóviles.

Más despacio que la UE

Aunque el despliegue de estas infraestructuras es lento en todo el continente, el crecimiento en España ha sido menor que la media en los últimos meses. En el tercer trimestre, el indicador de infraestructura de recarga calculado por la patronal alcanza una valoración de 6,2 puntos sobre 100, donde 100 implica llegar a estos 45.000 puestos. Esto supone un crecimiento de 6 décimas, mientras que la media europea se sitúa en los 12,1 puntos, con un aumento de 1,2 puntos en el último trimestre, el doble que en la nación.

El retraso en la creación de una buena infraestructura es el principal talón de Aquiles para la electrificación en España. Durante el tercer trimestre del año, el indicador global que valora la penetración de la electromovilidad ha crecido tan solo 0,4 puntos, con una valoración total de 14,6, siendo 100 la cifra a aspirar. Con esta nota, España se mantiene en las últimas posiciones del ranking europeo, superando únicamente a Hungría y República Checa, pero cada vez más lejos del ritmo que marca Europa que, con un crecimiento de 1,1 puntos, alcanza una valoración media de 30,3 sobre 100.

Este informe refleja que la distancia entre el conjunto europeo y España sigue aumentando, representando en el tercer trimestre una brecha de 15,7 puntos, siete décimas más que en el trimestre anterior. Mientras que países del entorno como Alemania o Francia crecen 1,3 puntos y 1,7 puntos respectivamente, España sigue estancada con un crecimiento leve.

El mercado se expande lentamente

El mercado de venta de coches eléctricos es el indicador que está teniendo un mejor comportamiento en esta materia, aunque también sigue lejos de los objetivos marcados. Hasta octubre, se han matriculado 67.082 coches eléctricos, un poco más de la mitad de los 120.000 que el PNIEC esperaba traer a las carreteras este año.

Esta cifra representa un incremento de las ventas de un 11% en 2022 respecto al 2021, lejos de la media global. Según una reciente investigación de Bloomberg New Energy Finance (BloombergNEF) en asociación con Bloomberg Philanthropies y en cooperación con la Coalición Acceleratin to Zero (A2Z), las ventas mundiales de eléctrico superan los 10 millones este año, un 60% más que en 2021.

Recibe nuestra newsletter diaria

O síguenos en nuestro  canal de Whatsapp