Ábalos palidece: las detenciones de sus amigos Koldo y Patricia le ponen contra las cuerdas

Koldo García, chófer y guardaespaldas de José Luis Ábalos durante su etapa como Ministro de Transportes, fue detenido ayer por presunta corrupción en la compra de mascarillas durante la pandemia.

José Luis Ábalos y Pedro Sánchez, en una imagen de archivo. EFE

José Luis Ábalos y Pedro Sánchez, en una imagen de archivo. EFE

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«Me he quedado estupefacto con esto…», balbuceó ayer el exministro de Transportes, José Luis Ábalos, cuando, en el Congreso, fue preguntado sobre las detenciones que esa misma mañana se habían producido en el marco de la investigación de una presunta trama corrupta que se habría lucrado con la compra de material sanitario durante la pandemia. Entre los detenidos, sus amigos Koldo García Izaguirre y la mujer de este, Patricia Uriz Iriarte.

«Duelen estas cosas claro… Por favor, todo se hizo bien, a través de mecanismos legales, se hicieron las contrataciones por Comunidades Autónomas, revisadas por Tribunal de Cuentas… Siempre he estado tranquilo y estoy tranquilo, no acabo de entender su participación en esto, ojalá pueda informarme», dijo Ábalos en los pasillos del Congreso.

La Unidad Central Operativa de la Guardia Civil, la UCO, puso en marcha ayer miércoles en ocho provincias españolas la operación ‘Delorme‘, coordinada por el Juzgado Central de Instrucción número 2 de la Audiencia Nacional y la Fiscalía Anticorrupción. Una veintena de personas fueron detenidas.

Las investigaciones se iniciaron hace dos años, después de que el Partido Popular de Madrid denunciara varios contratos públicos firmados durante la pandemia para la compra de material sanitario.

Entre los contratos investigados figura el adjudicado por Puertos del Estado, para la compra de mascarillas, por 24,2 millones, otro de Adif, por 12,5 millones, y un tercero adjudicado por Interior, pero en el que también intermedió Transportes, por 3,5 millones.

Los contratos fueron adjudicados a una empresa domiciliada en Zaragoza, Soluciones de gestión y apoyo a empresas, que pasó de facturar cero euros en 2019 a ingresar 53 millones de euros en 2020.

El valenciano José Luis Ábalos, cercano a Pedro Sánchez, ocupó la cartera de Fomento entre 2018 y 2020 y en enero de ese año fue nombrado Ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana.

En junio de 2021 el Presidente del Gobierno remodeló el Gobierno sacando del mismo, de forma sorpresiva, a Ábalos. El exMinistro decidió también entonces abandonar la secretaría de organización del PSOE.

¿Estuvo su salida del Gobierno relacionada con la investigación sobre los contratos millonarios adjudicados siendo él Ministro de Transportes?

«Obviamente no, pero en fin», dijo ayer Ábalos. «Parece que el artista tengo que ser yo, ¿no?», indicó. «No tengo ni idea, pero es así la cosa… muy decepcionado, en fin, espero que no les pase a ustedes«, declaró ayer ante los periodistas el exMinistro, cada vez más pálido.

La sombra de Ábalos

Dice Ábalos estar «tranquilo», pero obviamente no puede estarlo. Más allá de las responsabilidades que pudiera tener en los contratos investigados por la Guardia Civil, su estrecha relación con Koldo García y Patricia Uriz, a los que enchufó en el Ministerio que dirigía, le ponen contra las cuerdas.

Koldo García fue la sombra de Ábalos durante su etapa en Transportes. Quien fuera portero del puticlub Rosalex de Pamplona, escolta después de cargos del PSOE en Navarra y de UPM, concejal de su pueblo natal por el PSOE, se vinculó a Ábalos en 2017.

Con anterioridad, Koldo García participó en movimientos antidesahucios y, en 2014, Pedro Sánchez le dedicó una publicación en Facebook llamándole «el último azikolari socialista, un titán contra los desahucios«.

Una vez se arrimó a Ábalos, Koldo García se convirtió en su sombra. Le hizo de chófer y de escolta siendo Ministro; en enero de 2020 acompañó a Ábalos en la polémica reunión secreta que el exMinistro mantuvo con la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, en Madrid. Y con el estallido de la pandemia trabajó intermediando en la compra de material sanitario.

La lealtad mostrada por Koldo García y su mujer, Patricia Uriz -ambos militantes socialistas en Navarra- fue recompensada por Ábalos. García fue nombrado consejero en Renfe Mercancías, sin tener experiencia alguna en el sector o la presumible formación para ocupar el puesto. Patricia Uriz también logró un puesto como ayudante de secretaría en el Ministerio de Transportes.

En septiembre de 2021, tras la salida de Ábalos del Ministerio, se hizo oficial el cese de Koldo García como consejero en Renfe. El Ministerio de Transportes informó ayer a este periódico que Patricia Uriz ya no está en nómina, pero no precisó los motivos de ello.

«Con el tiempo vas perdiendo la relación, ahora no tengo asistente ni nada… Por lo que sé tenía una vida muy normalita, me cuesta creerlo, primero porque es un golpe, segundo porque me parece increíble«, declaró ayer Ábalos cuando se le preguntó si mantenía relación con Koldo García.

Pero lo que es increíble es que el valenciano siga ocupando un asiento en el Congreso como diputado después de haber enchufado a dos personas investigadas por corrupción.

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