Florentino Pérez entra en la minería australiana con ACS y un proyecto de 400 millones
ACS refuerza su apuesta por los minerales estratégicos con un nuevo proyecto en Australia
Florentino Pérez invierte en la minería australiana
El grupo ACS ha vuelto a dar un paso firme en su estrategia de diversificación y apertura a sectores de alto valor añadido. Su filial, la minera Thiess, controlada por ACS, ha suscrito un acuerdo de 400 millones de euros con la minera Harmony para desarrollar una mina de cobre en Australia según La Razón.
Una mina clave en Cloncurry (Queensland)
La operación contempla el desarrollo de una mina de cobre en la región de Cloncurry, en Queensland. Esta, según los responsables, tal y como detallaban en el rotativo digital de La Razón, se convertirá en la más grande de cobre del estado australiano.
El contrato incluye múltiples fases. Desde movimientos de tierra a granel y construcción de talleres, hasta la provisión de servicios de minería durante cinco años. Tras la fase de construcción, está previsto que Thiess preste servicios mineros desde junio de 2026 hasta junio de 2031 según El Español. Estas tareas abarcarán perforación y voladura, planificación de la mina, operaciones mineras y mantenimiento de equipos móviles en minas a cielo abierto. Las obras iniciales ya han arrancado. Desde el pasado mayo, según El Confidencial, Thiess ha comenzado con trabajos de movimiento de tierras y obras civiles.
Un posicionamiento estratégico en la minería global
Con este acuerdo, ACS da un claro mensaje sobre su apuesta por los minerales críticos vinculados a la transición energética, las energías renovables y la electrificación. Thiess, con su experiencia internacional, consolida así su posición como actor global en el ámbito de la minería a gran escala tal y como lo corroboraba La Razón.
Este movimiento no es aislado. ACS ya ha venido ampliando su presencia en el sector minero, no sólo en cobre sino también en otros proyectos con múltiples contratos en Australia. Por ejemplo, tal y como desvelaba El Mundo, hace pocos meses Thiess obtuvo una prórroga de contrato para operar la mina Lake Vermont Mine, también en Queensland.

De este modo, ACS diversifica sus fuentes de ingreso, reduciendo su dependencia del tradicional negocio de infraestructuras y construcción, y posicionándose con fuerza en un mercado estratégico a largo plazo tal y como lo detallaba El País.
Implicaciones económicas y bursátiles
El anuncio del acuerdo ha tenido un impacto inmediato en los mercados. Las acciones de ACS se dispararon tras conocerse la noticia. Esto refleja la percepción de los inversores, según La Razón, de que la compañía no solo refuerza su perfil dentro de su sector clásico, sino que se proyecta hacia sectores con alta demanda futura como la minería de materias primas críticas.
Más allá del valor bursátil, para ACS este tipo de contratos supone un esperado flujo de caja, estabilidad a medio/largo plazo y la posibilidad de capitalizar el crecimiento del mercado cuprífero, impulsado por las necesidades de electrificación, renovables e infraestructuras.
Un giro estratégico: de la construcción a la minería crítica
Tradicionalmente, ACS se ha conocido como una gigante de la construcción e infraestructuras. Pero con operaciones como la de Thiess en Australia, el grupo demuestra su intención de evolucionar hacia un grupo más diversificado y con un pie firme en el sector minero. Esta transformación puede interpretarse como una respuesta a los cambios globales: la transición energética, la demanda creciente de metales como el cobre, y la necesidad de abastecer nuevas tecnologías y energías limpias, tal y como apuntaban desde El País.
Este enfoque estratégico puede ser la clave para que ACS mantenga su competitividad durante las próximas décadas, adaptándose a las nuevas dinámicas de la economía global. El acuerdo de 400 millones de euros con Harmony para la Eva Copper Mine marca un antes y un después en la estrategia de ACS, según La Razón. A través de Thiess, el grupo asume un papel más relevante en la minería global, especialmente en minerales clave para la transición energética y las nuevas tecnologías. Este paso reafirma a ACS como un actor versátil: no solo en construcción e infraestructuras, sino también en minería de alta escala, con visión de largo plazo.
Para ACS este proyecto representa una apuesta decidida por adaptarse a las tendencias globales: diversificar ingresos, apuntar a sectores estratégicos, y consolidar una posición internacional.