Actualizado
Vodafone y MasOrange alzan la voz contra Telefónica: la CNMC sube hasta un 14,6% el alquiler de los conductos de la operadora
Telefónica, Vodafone y Masorange pugnan por ganar clientes a través de sus marcas de bajo coste
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha aprobado una subida de entre el 11% y el 14,6% en los precios mayoristas que Telefónica cobra a otros operadores por el uso de su infraestructura física –conductos, arquetas, cámaras y postes–, esenciales para el despliegue de redes de fibra óptica en España.
La decisión, publicada el 30 de junio de 2025 tras un proceso de consulta pública, afecta a unos 370 operadores alternativos que acceden a más de 120.000 kilómetros de subconductos y más de dos millones de arquetas, y ha generado una fuerte controversia en el sector.
¿Qué cambia con la nueva revisión de precios?
La subida afecta a dos tipos de tarifas:
- Precios recurrentes: son los que los operadores pagan mensualmente a Telefónica por el uso continuado de las infraestructuras. Aumentan un 11% de media, situando, por ejemplo, el precio del subconducto de 40 mm en 51,67 euros por kilómetro y mes (antes 46,50 €), el conducto de 63 mm en 145,23 euros (antes 130,70 €), y el tendido en postes en 0,63 euros al mes (antes 0,57 €).
- Precios no recurrentes: corresponden a actuaciones puntuales, como visitas técnicas o análisis de viabilidad, y suben un 14,6%, en línea con la evolución de los costes laborales desde la última revisión en 2021.
La CNMC justifica la actualización por el incremento de los costes de mantenimiento y operación de estas infraestructuras y asegura que el modelo de costes empleado es coherente con la regulación europea y la revisión anterior de 2021.
Desde 2009, la regulación obliga a Telefónica, como operador dominante, a ofrecer acceso a su infraestructura pasiva a terceros, permitiendo así el despliegue de redes de fibra óptica por parte de operadores alternativos en todo el territorio.
Este acceso ha sido fundamental para el desarrollo de la competencia en el mercado de banda ancha y para la expansión de la fibra óptica en España, uno de los países líderes en cobertura FTTH (fiber to the home) en Europa.
Un servicio clave de Telefónica para la competencia
El uso de la red de conductos y postes de Telefónica ha abaratado y acelerado el despliegue de redes, permitiendo que compañías como MasOrange, Vodafone, Digi, Adamo y decenas de operadores locales puedan ofrecer servicios de alta velocidad sin necesidad de duplicar costosas infraestructuras de obra civil.
La subida ha sido recibida con duras críticas por parte de los operadores alternativos, que la consideran “abusiva” y advierten de que podría tener un impacto negativo en la competencia y en los precios finales para los consumidores.
MasOrange y Vodafone, los principales afectados por volumen de red, estudian recurrir la medida tanto en vía administrativa como judicial, al considerar que la CNMC ha favorecido los intereses de Telefónica y que la actualización debería haberse integrado en el próximo análisis de mercado de banda ancha, actualmente en marcha.
La Asociación Nacional de Operadores Locales de Telecomunicaciones (Aotec), que agrupa a más de 80 operadores, ha denunciado incluso ante la Comisión Europea que el incremento podría llegar a obstaculizar gravemente la competencia, especialmente en zonas rurales y pequeños municipios, donde el acceso a la infraestructura de Telefónica es la única vía viable para desplegar fibra óptica.
Entre las principales quejas del sector destacan:
- Margen de Telefónica: MARCo, la oferta mayorista de acceso a infraestructuras, es el segundo servicio más rentable para Telefónica, con un margen del 56% y más de 70 millones de euros de ingresos anuales, principalmente a costa de sus competidores.
- Falta de censo actualizado: Los alternativos denuncian que muchas canalizaciones atribuidas a Telefónica fueron desplegadas con fondos públicos y no se distingue su titularidad, lo que podría inflar los costes de acceso.
- Previsibilidad regulatoria: Bruselas ha pedido a la CNMC mayor claridad y previsibilidad en futuras revisiones, algo que el regulador español se ha comprometido a mejorar.
Telefónica, por su parte, defendía en la consulta pública que los precios deberían actualizarse automáticamente cada año en función del IPC y de los costes laborales, y que los precios que ofrecen otros operadores para acceder a sus propias infraestructuras no están regulados, lo que genera un desequilibrio competitivo.
La CNMC ha rechazado esta petición, manteniendo el control regulatorio y la revisión periódica como garantía de adecuación a los principios regulatorios y de competencia.
La Comisión Europea, aunque no ha bloqueado la medida, ha emitido observaciones metodológicas y ha instado a la CNMC a aportar mayor previsibilidad en futuras revisiones.
El regulador español ha indicado que están en marcha dos procedimientos clave que definirán el futuro marco regulatorio, el nuevo análisis de mercado mayorista de acceso a infraestructuras físicas y el procedimiento sobre los compromisos presentados por Telefónica.