La autocensura de una productora para no criticar al PP en la TVG
M Internacional Audiovisual cortó una canción para evitar emitir la frase "Adeus, cabronazos, voume a un paraíso fiscal como fan os do PP"

La emisión de una canción cortada del grupo Ataque Escampe en el programa Musigalité de la Televisión de Galicia fue un ejercicio de autocensura de la productora. Eso se desprende de los testimonios de técnicos de la propia empresa, que reconocieron el corte pactado.
El resultado fue que el tema ‘San Marino’, de la banda compostelana, se reprodujo mutilado, evitando así la emisión de la frase «Adeus, cabronazos, voume a un paraíso fiscal como fan os do PP».
Las razones del aproductora
M Internacional Audiovisual, la productora del espacio que emite TVG, achacó el corte a una casualidad ya que, según afirmaron, es frecuente que las canciones se emitan cortadas. Por un azar, se habría eliminado esa frase. La canción completa, además, estaba publicada en la web del programa.
Sin embargo, dos testimonios desde la propia empresa aseguran que hubo instrucciones para evitar esas líneas, pues a la dirección le parecía que podrían ser ofensivas. El primero lo revelaba la asociación Músicos ao Vivo a través de sus redes sociales. El encargado de postproducción del programa recibió orden de cortar expresamente la frase crítica, al considerar la dirección que podría resultar ofensiva.
A la mañana siguiente, también recibió orden de retirar la versión íntegra de la página web de Musigalité, cuando habitualmente se utiliza, precisamente, para incorporar los temas completos de los grupos.
Este es el relato completo de los hechos que narra Músicos ao Vivo:
La mañana del viernes, Ataque Escampe publicaba también a través de sus redes sociales un nuevo testimonio firmado por Lucía Cortiñas, que se identifica como la editora del programa, en el que reconoce la orden de eliminar la frase que criticaba al Partido Popular:
«Dado que a productora finalmente se empeñou en responsabilizar ao «erro dun técnico» e esto resulta unha alusión directa cara min xa que son a editora dese programa, como aparece nos créditos, véxome obrigada a limpar publicamente o meu nome. Alégrome que o responsable técnico do programa abrira a caixa das verdades e por fin poidamos desvelar o porque desta atrocidade. Fun eu a que meteu a «sutil tesoira» por petición expresa da productora. A esas alturas, despois de mil e unha loitas, xa non estabamos para discutir sobre os seus criterios. Pero dentro do meu poder de manipulación, acatei as ordes de maneira literal, sabendo e no fondo desexando que polo menos o grupo en cuestión se percatase da censura á que fora sometida a súa obra. Espero que todo este balbordo sirva para que non se repitan cousas polo estilo»