Un castillo en medio del bosque: así es el último (y alucinante) proyecto de los hermanos Roca
Cristalización de un sueño largamente perseguido, Esperit Roca es una gigantesca propuesta gastronómica, enológica, turística y cultural que se alza en una fortaleza muy cerca de Girona
Foto: Esperit Roca.
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A unos pocos kilómetros de Girona (y 10 minutos desde la estación del AVE) se alza, en el centro de un inmenso bosque en Sant Julià de Ramis, se alza un espectacular castillo con foso almenas y unas dimensiones impresionantes.
A 200 metros de altura y ocupando la totalidad de la cima de la montaña de los Sants Metges (Santos Médicos) -dedicada a San Cosme y San Damián-, es el nuevo feudo de los hermanos Roca, donde han desarrollado un complejo que viene a completar el universo conocido como ‘ecosistema Roca de Girona’ cuyo epicentro en el legendario Celler de Can Roca.
Joan, Josep y Jordi Roca culminan así, tras casi dos años de ideas, proyectos y obras, una nueva aventura en una fortaleza del siglo XIX que definen como “un proyecto ambicioso y emocionante”.
Tan ambicioso, de hecho, que cuenta con un conjunto de equipamientos que van desde un restaurante donde reinterpretar sus platos más icónicos, a una bodega, una destilería, un espacio expositivo, una tienda y un hotel boutique, también con restaurante, que denominan Esperit Roca.
“El Castillo de Sant Julià de Ramis es un emplazamiento para seguir el avance y los nuevos retos de crecimiento conceptual, espiritual, lúdico. Un espacio, donde poder hacer crecer a nuestros equipos, activar el talento interno y construir un escenario gastronómico”.
Un espacio con historia
El Castillo de Sant Julià de Ramis, que corona la cima de la boscosa montaña dels Sants Metges, fue construido en el siglo XIX cercano a ‘Kerunta’, un poblado íbero indigete cuyos habitantes fueron obligados por los romanos, hace casi dos mil años, a repoblar la recién fundada Gerunda, en plena guerra civil Sertoriana.
Sin embargo, el castillo no se estrenó con fuego real y nunca ejerció su papel como fortificación defensiva del acceso norte de Girona y así, a partir de su abandono en los años sesenta del pasado siglo, se degradó durante decenios convirtiéndose, eso sí, en un objetivo recurrente para excursiones de fin de semana, de aquellas con picnic y merienda.
También, antes del actual desembarco de los Roca, se había desarrollado un primer proyecto que empezó con la restauración de los más de 2.000 m2 de superficie del castillo. Una obra firmada por el estudio de arquitectura Fusés-Viader que modernizó las instalaciones defensivas con importantes reformas arquitectónicas a base de acero corten, hormigón visto, piedra y vidrio.
Inicialmente iba a contar con un restaurantes, Atempo, dirigido por Jordi Cruz, un museo de joyas creado por el joyero Ramón López (vinculado a Tiffany’s, y a la diseñadora Elsa Peretti), una joyería y un hotel boutique. Un proyecto que, por diferentes razones, no llegó a madurar.
Un restaurante o centro de interpretación
El restaurante Esperit Roca ocupa el amplio espacio de las antiguas caballerizas y presenta un look de diseño con interiorismo que aúna comodidad, funcionalidad y calidez, todo con una estética totalmente Roca.
El nuevo espacio no busca convertirse en un segundo Celler de Can Roca, pero sí se propone realizar un viaje por los casi 40 años de historia de la cocina de los tres hermanos reinterpretando platos que han sido icónicos.
La propuesta gastronómica es triple: por un lado está la carta para seleccionar platos y, por otro, dos menús, Espíritu Salado 6/2 que incluye aperitivos + 6 platos salados +2 postres (170€), y Espíritu Dulce 2/6 que consta de aperitivos + dos platos salados + seis postres (139€).
Entre los platos que se pueden degustar están los ya míticos timbal de manzana y foie, brioche al vapor de boletus pinicola, los aperitivos El Mundo de Japón, Perú, Corea, Turquía y Tailandia, mar y montaña vegetal, escabeche de Rubio y lenguado a la plancha con salsa de beurre blanc.
También se recuperan la comtessa de espárragos blancos, toda la gamba, cigala artemisa, trilogía de rodaballo, cochinillo ibérico con pie de cerdo y espardeña, brioche de poularda, pichón a la brasa, cromatismo verde, llueve en la pineda, postre làctic, bombones, libro viejo, anarkia de chocolate o viaje a la Habana, entre muchos.
El chef ejecutivo en este nuevo proyecto es Raúl Sillero, que dirigió el restaurante Ágora Mas Marroch, mientras que Carles Aymerich ejerce de sumiller y jefe de sala.
Esperit Roca-Destilería, la cocina líquida del Celler de Can Roca
Este espacio de I+D de creación líquida presenta una “constelación de bebidas que interpretan paisajes”, Para Josep Roca es el retorno al pasado: “Ya desde crio, en el bar de nuestros padres, me fascinó el mundo de los aguardientes y licores. Contemplar las etiquetas me hacía viajar a países imaginarios. Ahora tengo la ilusión de un chiquillo por compartir naturaleza líquida, recuperar memoria antigua y compartir pasajes embotellados”
La Destilería, que otorga un destacado protagonismo al cacao y la algarroba, presenta dos series. Por lado, Sèrie Paratge (Paraje): esencia del proyecto con la Ginebra de Té de Roca y el Aiguardent de Garrofa (aguardiente de algarroba), y el Vi amb Arrels (vino con raíces).
Por otra parte, la Sèrie Cacau, muy vinculada a Casa Cacao, la fábrica de chocolate de los Roca, con Ginebra de Cacao, Esperit de Cacao y Licor de Cacao, entre muchos otros.
Esperit Roca-Destilería es el resultado de siete años de investigación en los que se han creado bebidas como aperitivos, aguardientes, licores destilados y macerados, vinos fortificados, fermentados de frutas y legumbres e incluso, cervezas.
Muchas de estas creaciones ya han sido servidos en el Celler, pero ahora la propuesta es abrir el proyecto a un público más amplio.
La tienda
En el espacio vecino a la destilería se abre la tienda que ofrece productos de todo el universo Roca y de todas las tendencias como son las bebidas, Casa Cacao, Rocambolesc y Recicle, una novedad de los tres hermanos consagrada a la sostenibilidad.
Con 80.000 botellas recopiladas por Josep Roca, la bodega de Esperit Roca es la mayor del mundo en su categoría
También se venden libros y todo tipo de objetos de merchandasing de El Celler de Can Roca y como los espacios expositivos está abierta al público.
La bodega, una catedral natural del vino
Espacio semiesféricoy rabiosamente moderno, la bodega presenta una forma de cúpula y con un misterioso Óculo que recuerda al del Panteón de Roma, “un orificio al cielo”.
En esta inmensa superficie descansan 80.000 botellas de todo el mundo recopiladas por Josep Roca, lo que convierte a esta bodega en la mayor del mundo en su categoría. También es un pasillo de entrada al restaurante que simboliza el camino recorrido en casi 40 años del Celler de Can Roca.
CCR. Cocina. Conciencia. Reflexión
El castillo tiene también lugar para una exposición permanente, homenaje a las raíces, que se basa en la que se organizó en el Palau Robert de Barcelona en 2016 y que narra la trayectoria de El Celler de Can Roca.
Se trata de un recorrido visual que refleja “la evolución de un sueño hecho realidad”.
La zona expositiva se irá ampliando con espacios en los pisos superiores, galerías subterráneas y antiguas caballerizas. Por ejemplo, en una sala se expondrá reconocimientos y premios a los hermanos y sus marcas, y además, cada uno de los tres tendrá un espacio propio con sus trabajos.
En esta zona se incorporará también una biblioteca gastronómica que además de los libros Roca expondrá la biblioteca de Manolo Vázquez Montalbán (impresionante gastrónomo), cedida por su hijo Daniel Vázquez y libros sobre gastronomía catalana en general.
Más adelante se instalará una Academia dedicada a formación y un espacio para eventos.
Hotel Boutique Esperit Roca
Situado en el punto más alto de la fortaleza de Sant Julià de Ramis, y ofreciendo una vista 360º a los Pirineos, Girona y el Empordà – Costa Brava se encuentra el hotel boutique Esperit Roca.
Espacio perfecto para desconectar, es el segundo alojamiento de los Roca tras Casa Cacao en Girona, en este caso con 15 exclusivísimas habitaciones de 37 m2 -cinco de ellas dúplex-, con un interiorismo basado en la madera y los materiales naturales, con detalles como los lavamanos de piedra con fósiles y espectaculares cristaleras que integran la habitación en el paisaje verde y que regalan, por ejemplo, bañeras con vistas al horizonte.
En el exterior, jardines y más jardines con una piscina al aire libre que preserva la intimidad, e incluso un helipuerto.
Al frente del hotel encontramos a Manel de la Riva, responsable durante 20 años de la hospitalidad de El Celler.
Detalle importante, en el hotel hay otro restaurante que solo sirve a los huéspedes alojados con una gastronomía de proximidad y productos locales, con la firma Roca.
El porqué de todo ello
Vista la dimensión del proyecto, cabe preguntarse el porqué de Esperit Roca que, según sus protagonistas, es un proyecto para “regenerarnos en ilusión tanto nosotros mismos como el equipo porque complementa todo el ecosistema que El Celler ha desarrollado en Girona y en su entorno”.
Y añaden: “Sin movernos hemos creado un proyecto que nos da energía para seguir divirtiéndonos haciendo lo que más nos gusta, que es cocinar, servir y atender a quienes vienen a nuestras casas”.
Un paso que, además, abre el ecosistema Roca trabaja a todo tipo de públicos “Abarcamos diferentes franjas de modelos de negocio y de precios, de modo que se puede comer en Rocambolesc Bikineria por 7 euros, Can Roca por 16, Vii por 30, Normal por 60, Esperit Roca por 139 y 170 y El Celler de Can Roca por 315 euros”.
¿Funcionará? Solo por poner contexto, en 2023 y únicamente en El Celler se registraron 129.000 personas en lista de espera, y eso que no se admiten reservas con más de 90 días.
