Esta empresa española especializada en moda de segunda mano sigue expandiéndose al país vecino
El segmento de la moda de segunda mano alcanzará los 26.000 millones de euros en Europa para 2030
Promoción en una tienda de ropa. Foto EFE/Jorge Zapata.
El mercado de la moda de segunda mano vive en 2025 una auténtica revolución en Europa y, especialmente, en la Península Ibérica. Micolet, la plataforma española líder de compra y venta de prendas usadas, acaba de anunciar la absorción de su competidora lusa MyCloma.
La operación supone un paso estratégico para consolidar su presencia en Portugal y proyectar una red más robusta y eficiente en el sur de Europa.
Micolet, fundada en 2015 en Bilbao, nació con la misión de dar una segunda vida a la ropa y promover la moda sostenible.
En apenas una década ha evolucionado de ser un pequeño marketplace local a convertirse en referencia internacional, con presencia online en siete países (España, Portugal, Francia, Italia, Alemania, Polonia y Bélgica) y puntos de venta físicos en el norte de España.
El próximo desafío de la firma es afianzar su liderazgo en Portugal, donde el segmento de la moda circular experimenta un «boom» equiparable al de España.
La integración de MyCloma permitirá centralizar operaciones, migrar clientes y optimizar toda la logística, reforzando la posición de Micolet frente a competidores internacionales como Vinted, Wallapop o las nuevas plataformas surgidas en redes sociales.
Para los usuarios portugueses, el sitio web de MyCloma ya está siendo redirigido al dominio portugués de Micolet, y la transición incluye comunicación directa con vendedores para garantizar la continuidad de las ventas y el ciclo de la prenda.
La unión de ambas bases de usuarios aumenta la capilaridad y la oferta de prendas en Portugal, conectando a miles de consumidores y pequeños vendedores locales con el mercado europeo.
El auge imparable de la moda de segunda mano
La operación Micolet-MyCloma es un capítulo más de la tendencia de crecimiento exponencial del mercado de segunda mano en el sector textil europeo.
El mercado de segunda mano está en una tendencia de crecimiento exponencial, y la operacion Micolet-MyCloma es prueba de ello.
El segmento alcanzará los 26.000 millones de euros en Europa para 2030, con una tasa de crecimiento anual del 8,5%. La clave de este avance es doble: la conciencia medioambiental del consumidor y la necesidad de ajustar el gasto familiar.
En la península, tres de cada cinco españoles y portugueses han comprado alguna vez ropa usada, atraídos tanto por los precios como por los valores de sostenibilidad y responsabilidad ecológica.
El mercado portugués refleja la misma efervescencia: el auge de la “moda circular” ha implicado la creación de nuevas tiendas, la digitalización de la venta y la aparición de plataformas capaces de gestionar logística y devoluciones de manera eficiente.
Los informes de consultoras e instituciones sectoriales confirman que más de la mitad de los compradores combina la compra física y online, y que el 81% de las transacciones de segunda mano en Europa se sigue realizando en tiendas tradicionales, aunque el canal digital crece año tras año.
La colaboración de Micolet con grandes cadenas de retail (por ejemplo, el despliegue de Beebs en tiendas Kiabi), muestran cómo los grandes grupos multinacionales empiezan a profesionalizar y escalar la gestión de prendas usadas, integrándola en la oferta habitual y renovando el perfil del consumidor de ropa de segunda mano.
Micolet, por su parte, prevé superar los 2,5 millones de usuarios, vende cerca de 150.000 prendas mensualmente y centra su expansión en modelos híbridos: mantiene tiendas físicas seleccionadas como puntos de recogida, elimina las barreras de la logística y hace aún más rápida y práctica la experiencia para vendedor y comprador.
Estrategia digital y sostenibilidad
La integración de MyCloma refuerza varios ejes clave para el futuro de Micolet en la región: la digitalización de procesos, el foco en la sostenibilidad y la rentabilidad operativa.
La absorción coincide con la reorganización estratégica de la compañía: tras cancelar una ronda de inversión prevista para 2025, el grupo decidió apostar por la eficiencia interna y retrasar nuevas aperturas físicas en grandes ciudades como Madrid y Barcelona, centrándose en rentabilizar su red actual y fortalecer su base tecnológica.
Portugal representa una oportunidad singular, el mercado aún es más pequeño que el español, pero refleja gran potencial de crecimiento por el aumento de la conciencia ecológica y la rápida digitalización del consumo