Carrefour reclama 8,8 millones a Sonae, el dueño portugués de Arenal

La cadena francesa de supermercados lleva al grupo luso a los juzgados para que sufrague los litigios pendientes de sus supermercados en Brasil, que compró primero Wallmart y, después, Carrefour

Un supermercado Continente, del grupo Sonae, en Portugal

Un supermercado Continente, del grupo Sonae, en Portugal

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Carrefour ha iniciado una acción judicial para reclamar a Sonae que pague una serie de condenas judiciales de su antiguo negocio en Brasil, ahora en manos de la multinacional francesa. Sonae es el propietario de Arenal Perfumerías y uno de los principales distribuidores alimentarios de Portugal, a través de los supermercados Continente. Entre sus activos están también Worten o el grupo de telecomunicaciones NOS, del que es accionista mayoritario. El grupo luso se hizo con el 60% de Arenal en 2019 y, tras una etapa de fuerte crecimiento, impulsó la joint venture con Druni, que creará una compañía de 800 millones de facturación y unos 440 establecimientos de perfumería, cosmética y droguería.

El actual litigio viene de mucho más atrás. El grupo de la familia Azevedo decidió en 2005 desprenderse de 140 tiendas que mantenía en Brasil y que pasaron a manos de la norteamericana Wallmart por 635 millones. Posteriormente, los establecimientos fueron de nuevo traspasados a Carrefour, que pagó 1.100 millones en 2021 para hacerse con el negocio. Según informe el medio portugués ECO, la cadena francesa ha decidido iniciar una reclamación judicial contra Sonae por diversos procesos judiciales que arrastraban las tiendas y que ascienden a, cuando menos, 8,8 millones.

Ese importe que exige Carrefour estaría vinculado a diferentes litigios laborales, civiles y fiscales procedentes de la etapa en que operaban bajo la marca Continente.

Reclamaciones también en Brasil

El contrato de compraventa con Wallmart, explica ECO, incluía una cláusula por la que Sonae se comprometía a reembolsar a la compradora los costes derivados de procesos judiciales pendientes. De esta manera, cubría los litigios laborales o con proveedores, además de cualquier otra denuncia previa a la venta. En paralelo, el dueño de Arenal también habría firmado una comfort letter para dar cobertura a dichos litigios.

Carrefour considera que Sonae incumplió las obligaciones derivados de la venta de su negocio brasileño e inició una reclamación en el Juízo Central Cível de Lisboa en la que exige el reembolso de 8,8 millones por las cargas soportadas en los distintos procedimientos. Esta cuantía cubriría solamente una parte de los litigios, ya que existen otros procedimientos similares abiertos en Brasil.

Sonae, por su parte, alega que los tribunales portugueses son incompetentes para analizar este litigio en base a dos argumentos: por un lado, que el contrato de compraventa contiene un pacto de jurisdicción que atribuye las competencias a los tribunales brasileños; y, por otro, que la comfort letter en la que se basa la actual demanda no prevalece sobre el mencionado contrato a efectos de la determinación del foro competente.

Economía Digital Galicia

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