Stellantis ve inviable producir furgonetas impulsadas por hidrógeno «antes del final de la década»
El fabricante paraliza el desarrollo de pilas de hidrógeno para furgonetas e inicia conversaciones con Michelin y Forvia sobre el futuro de la empresa conjunta Symbio

Antonio Filosa, CEO de Stellantis
Stellantis derrapa con el hidrógeno. La compañía con planta en Vigo ha anunciado que paraliza su programa de desarrollo de pilas con este combustible al no ver viabilidad en el mercado a medio plazo. Esta decisión conllevará el inicio de conversaciones con Michelin y Forbia sobre el futuro de Symbio, la empresa conjunta en la que entró hace dos años al adquirir un 33% del capital.
El grupo automovilístico francés señala que el frenazo al desarrollo de furgonetas impulsadas por hidrógeno se debe a la falta de «perspectivas de evolución a medio plazo» en esta tecnología. Concretamente, alude a «la limitada disponibilidad de infraestructuras de repostaje de hidrógeno, los elevados requisitos de capital y la necesidad de mayores incentivos a la compra por parte de los consumidores».
Adiós a la nueva gama de furgonetas
En este contexto, Stellantis no prevé la adopción de vehículos comerciales ligeros propulsados por hidrógeno antes del final de la década, por lo que tampoco lanzará este año la gama Pro One, cuya producción en serie iba a comenzara este verano en Hordain (Francia), con las furgonetas medianas, y Gliwice (Polonia), con las furgonetas grandes.
Pese a ello, dice el fabricante, el personal de estos centros de producción no se verá afectado, y que las inversiones en I+D vinculadas al hidrógeno se reorientarán hacia otros proyectos.
Los problemas del hidrógeno
El grupo ha subrayado que el estado actual del segmento del hidrógeno también presenta «retos financieros» para diversas «partes interesadas», refiriéndose a que ha iniciado «conversaciones con los accionistas de Symbio para evaluar las consecuencias actuales del mercado y preservar los mejores intereses de Symbio, en línea con sus respectivas obligaciones».
«El mercado del hidrógeno sigue siendo un segmento de nicho, sin perspectivas de sostenibilidad económica a medio plazo. Debemos tomar decisiones claras y responsables para garantizar nuestra competitividad y responder a las expectativas de nuestros clientes con nuestra ofensiva de turismos y vehículos comerciales ligeros eléctricos e híbridos», ha asegurado el director de Operaciones para Europa ampliada, Jean-Philippe Imparato, quien recuerda el contexto en el que la empresa se está movilizando para responder a las exigentes normativas sobre CO2 en Europa.