La venta del negocio portugués de Remolcanosa a Boluda encalla en Competencia
El organismo de Competencia luso abre una investigación en profundidad sobre la operación firmada entre Boluda y Nosa Terra 21, el grupo de la familia Silveira, y manifiesta "serias dudas" de que cumpla los criterios para poder materializarse
El empresario Vicente Boluda, interviene durante un acto para reivindicar el Corredor Mediterráneo, a 20 de noviembre de 2025, en Valencia, Comunidad Valenciana (España). Rober Solsona / Europa Press 20/11/2025
Comentarios
El pasado verano, la familia Silveira cerró la venta del negocio portugués de Remolcanosa a Boluda Corporación Marítima, una operación que conllevó el traspaso de 35 embarcaciones, con tres remolcadores oceánicos –Castelo de Sines, Castelo de São Jorge y Castelo de Óbidos– y una veintena de remolcadores de menor tamaño, además de barcos de apoyo y transporte o lanchas de amarre.
La filial lusa de Grupo Nosa Terra 21, también dueña de la naviera Elcano, cerró el 2024 con casi dos millones de beneficios, aunque con una aportación de solo 646.000 euros al conglomerado familiar debido a los ajustes de consolidación. Contaba con 15,4 millones en activos, aunque el volumen real es bastante mayor, al añadir las filiales lusas Tinita –11 millones en activos–, Reboport –14,7 millones en activos–, Rebonave —12,3 millones en activos– y Multisub –1,6 millones en activos–.
La desinversión de la compañía gallega, que registró pérdidas de algo más de dos millones el año pasado, encajaba en la estrategia de crecimiento de Boluda en el país vecino, donde presta servicios de remolque y amarre en el puerto de Sines y mueve contenedores con escala en Leixoes y Setúbal. Con el negocio de Remolcanosa extendía su actividad a Viana do Castelo, Aveiro, Figueira da Foz, Lisboa, Setúbal y Portimão, además de los servicios de rescate en alta mar de los remolcadores oceánicos.
La transacción, sin embargo, está ahora bajo la lupa de Competencia. El organismo supervisor de Portugal, la Autoridade da Concorrência, informó este martes de que su consejo de administración ha decidido abrir una investigación en profundidad sobre la venta a Boluda, al albergar «serias dudas» sobre el impacto de la concentración. La entidad hace referencia, concretamente, a la compatibilidad de la fusión con el criterio establecido en la ley de competencia lusa sobre el mercado relevante identificado.
Este criterio recogido en la normativa señala que para autorizar una concentración de empresas es necesario que «no sean susceptibles de crear obstáculos significativos a la competencia efectiva en el mercado nacional o en una parte sustancial de este». La influencia significativa que ganaría Boluda puede contradecir este principio. Y eso es lo que la competencia lusa se dispone a investigar, lo que podría echar al traste la venta del grupo gallego.
