El Gobierno adjudica a Telefónica el refuerzo de la ciberseguridad de la RedIRIS por 12,8 millones
La teleco que preside Marc Murtra suministrará equipos para proteger la red frente a ciberataques
Fachada del edificio de Distrito Telefónica. Foto: Europa Press.
Telefónica se ha hecho con uno de los contratos del Gobierno para reforzar la conocida como RedIRIS, perteneciente a la entidad pública Red.es y dependiente del Ministerio de Transformación Digital. La licitación se ha adjudicado por 12,8 millones de euros (IVA incluido) y tiene por objeto el refuerzo en ciberseguridad de las infraestructuras de la red.
La teleco que preside Marc Murtra se ha proclamado ganadora en un procedimiento de contratación restringido, es decir, al que solo pueden presentarse las empresas que hayan sido previamente seleccionadas por el órgano de contratación y cumplan los requisitos de solvencia técnica, económica o profesional.
En este caso, el órgano licitador ha sido la Dirección General de Racionalización y Centralización de la Contratación-Junta de Contratación Centralizada, dependiente del Ministerio de Hacienda que lidera María Jesús Montero.
El objeto del contrato es el suministro de infraestructuras para «la mejora de las capacidades de mitigación de ataques de denegación de servicio» de RedIRIS.
Telefónica proveerá equipos para frenar ciberataques
Así, Telefónica será la responsable de la implementación de equipos radio, televisión, comunicaciones y telecomunicaciones y equipos conexos destinados a proteger la red frente a ataques DDoS, que son una de las amenazas más comunes en ciberseguridad.
La teleco será la encargada de proveer de estos equipos por un importe de 12,8 millones de euros (10,58 millones sin impuestos), según el acta de adjudicación publicada en la plataforma de contratación del sector público el pasado 16 de octubre a la que ha accedido este medio.
Se trata de un contrato que cuenta con financiación de los fondos europeos que España gestiona a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. En este caso concreto, el contrato forma parte del Plan Nacional de Ciberseguridad del país.
Telefónica, por su parte, gana impulso y sigue engordando su negocio a las puertas de la presentación de su plan estratégico. Marc Murtra dará las claves el próximo cuatro de noviembre tras intensos cambios corporativos y financieros en los últimos meses.
Respecto a la RedIRIS, se trata de una infraestructura que da servicio de fibra óptica a unos 500 centros académicos y científicos de todo tipo, incluido el Ministerio de Defensa y que cuenta con unos cinco millones de usuarios finales.
Dispone de una red troncal, denominada RedIRIS NOVA, de más de 16.000 kilómetros de fibra iluminados por más de 190 equipos ópticos distribuidos por todo el territorio nacional y que cuenta con 87 puntos de presencia (PdPs).
Sobre esta infraestructura óptica, construye una red IP troncal de comunicaciones de alta capacidad que proporciona acceso a sus usuarios tanto a la Intranet mundial de la investigación como a la Internet Global.
La cancelación de otro contrato de la RedIRIS
Esta nueva licitación llega tras un verano controvertido. El Gobierno canceló a finales de agosto la adjudicación de un contrato de unos diez millones de euros a Telefónica para mejorar las prestaciones de fibra óptica con equipos de Huawei de la RedIRIS, un objeto que nada tiene que ver con el contrato de ciberseguridad que acaba de ganar.
En este caso, la ganadora debería enviar, recibir, dirigir y asegurar la información dentro de la red o, en otras palabras, suministrar el denominado equipamiento IP, que incluye routers y switches, entre otros dispositivos.
Aunque no había llegado a su fase final, la mesa de contratación ya había propuesto por unanimidad elevar al órgano de contratación la propuesta de Telefónica.
El objetivo de la licitación era ampliar la capacidad de transmisión de la RedIRIS hasta 400 gigabits por segundo (Gbps), frente a los 100 Gbps actuales.
El Ministerio para la Transformación Digital ordenó a Red.es, encargada de la licitación, dar marcha atrás en un contexto marcado por las tensiones entre la tecnológica china, Estados Unidos y la Unión Europea, alegando que se trataba de una decisión «de estrategia digital y autonomía estratégica».
Desde la cartera que dirige Óscar López indicaron entonces que se iba a proceder a elaborar y publicar un nuevo contrato para renovar el equipamiento de una tercera parte de la RedIRIS. No obstante, casi dos meses después no se ha iniciado ningún nuevo proceso.