Esta marca deportiva supera el bache del concurso de acreedores tras meses de pugnas judiciales
La decisión fue tomada por el tribunal económico de París, dando por cerrado un proceso concursal marcado por disputas y tensiones internas
Le Coq Sportif ha superado el concurso de acreedores
Le Coq Sportif, la histórica firma francesa que vistió a los atletas galos durante los Juegos Olímpicos de París 2024, ha superado el concurso de acreedores gracias a la oferta de un millonario empresario. En los últimos años, la compañía había atravesado una de las crisis más complejas de su larga trayectoria. Desde noviembre ha estado en concurso, marcado por disputas internas y tensiones entre socios.
La marca fue fundada en 1882 por Émile Camuset en la localidad de Romilly-sur-Seine, Le Coq Sportif es mucho más que una firma de moda deportiva, es sinónimo de identidad nacional, elegancia y tradición artesanal. Su logotipo, el emblemático gallo dentro de un triángulo, es reconocido en todo el mundo y ha acompañado a grandes selecciones y eventos como el Tour de Francia o equipos de fútbol y rugby.
En los últimos años, la marca ha intentado posicionarse como un referente tanto en el deporte como en la moda urbana, apostando por el diseño atemporal y la producción local. Sin embargo, los resultados financieros no han acompañado. En 2023, cerró su ejercicio con unas pérdidas superiores a los 28 millones de euros. En noviembre entraron en concurso de acreedores.
A pesar de un repunte en el primer semestre de 2024, las pérdidas continuaron, alcanzando los 18 millones.
Para sacar a la compañía del concurso de acreedores, había dos ofertas sobre la mesa. La mejor posicionada era la del empresario franco-suizo Dan Mamane, quien ya tiene experiencia en este tipo de situaciones. Además, según el medio Moda, este grupo propuso mantener la plantilla actual, así como conservar la sede en Romilly y asumir parte de la deuda, lo que les colocó en ventaja ante la administración concursal.
La segunda propuesta proviene de un consorcio formado por Neopar, Iconix, el empresario Xavier Niel, el judoka Teddy Riner y la familia fundadora Camuset. A diferencia de otros aspirantes, este grupo ofreció una inyección inmediata de 60 millones de euros, aunque aseguran haber sido excluidos del proceso por decisión de los administradores judiciales.
Le Coq Sportif cambia de manos tras el concurso de acreedores
La firma francesa iniciará una nueva etapa tras ser adjudicada al empresario franco-suizo Dan Mamane, quien se convierte en su nuevo propietario. La decisión fue tomada por el tribunal económico de París el pasado viernes 4 de julio, dando por cerrado el concurso de acreedores marcado por disputas y tensiones internas desde el mes de noviembre.
La propuesta de Mamane, respaldada por una inversión de 70 millones de euros, fue considerada por el tribunal como la más sólida desde el punto de vista industrial. Así lo señalaron fuentes del Ministerio de Economía, destacando su compromiso con la producción en Francia, especialmente en Romilly-sur-Seine, donde la marca tiene sus raíces.
En el camino quedó una candidatura alternativa lanzada por Neopar, el grupo estadounidense Iconix, el empresario Xavier Niel, el medallista olímpico Teddy Riner y la familia fundadora Camuset. Este grupo había prometido una inyección inmediata de 60 millones de euros, pero denunció haber sido marginado del proceso. De hecho, no se descarta que intente impugnar la decisión judicial.
Para liderar la transformación de Le Coq Sportif, Mamane contará con Alexandre Fauvet, exdirector general de Lacoste y cofundador de Fusalp, quien asumirá la dirección general. También suena el nombre de Cédric Meston, actual responsable de Tupperware France, como posible refuerzo en la gestión operativa.
El reto que enfrenta la compañía tras el concurso de acreedores no es menor. Deberán modernizar su red de distribución, además de ajustar su estructura de costes y competir en un mercado global dominado por gigantes como Nike, Adidas o Puma. La nueva etapa ya ha comenzado, aunque el desenlace judicial podría seguir dando que hablar. Todo dependerá de Neopar y su amenaza.