Nobu: la perla oriental en la playa de la Concha que brilla entre pintxos y chuletones

Abrir un restaurante exótico en San Sebastián, feudo de una de las cocinas más asentadas de la gastronomía europea, es un reto hercúleo. Un desafío que la cadena de restaurantes Nobu, propiedad de Nobu Matsuhisha y Robert De Niro, ha decidido encarar con su última apertura en España, en primera línea de mar en la playa de la Concha. El resultado es admirable.

Ubicado en un antiguo palacete donostiarra, la cadena Nobu ha apostado por la apertura del restaurante y de un hotel de lujo boutique. El alojamiento cinco estrellas de lujo cuenta con una veintena de habitaciones.

El enclave es de lo más espectacular, en primera línea de mar. Entre sus mayores activos, las suites elevadas con vistas a la playa de la Concha, así como una terraza bar que se monta prácticamente encima de la arena desde una segunda planta y desde donde se divisan la isla de Santa Clara, el torreón de Igueldo o la figura vigilante del Sagrado Corazón de Jesús en el Monte Urgull.

No por nada el edificio, construido por el arquitecto Francisco Urcola a pocos pasos del Palacio de Miramar, residencia de verano de la Reina María Cristina desde el siglo XIX, era conocido como Palacio Vista Eder, haciendo honor a las maravillosas vistas.

110 años después de su construcción, fue el diseñador Tomás Alía el encargado de aunar el estilo Belle Époque de la mansión con la identidad japonesa y el concepto de lujo propio de Nobu. Pese a lo alejado de ambos lenguajes, el resultado funciona, logrando mezclar con soltura elementos como la fachada de estilo vascofrancés con la galería que se inspira en los clásicos pórticos tori japoneses, dando lugar a espacios elegantes y refinados donde la luz y las texturas de aspecto pétreo potencian un ambiente relajado y casi espiritual.

Lujo en las vistas y los platos

La terraza bar, que sirve al hotel para el servicio de desayunos y coctelería, ofrece la oportunidad de probar ya buena parte de la cocina elegida para su restaurante: la cocina fusión japonesa, peruana y otras especialidades que forman parte del sello de personalidad de la cadena Nobu. Este es ya su quinto establecimiento en España, tras Barcelona, Marbella, Ibiza y Sevilla y a la espera de próximas aperturas.

En todo el mundo cuenta con medio centenar de locales ya, desde el originario Nobu New York, que se convirtió rápidamente en uno de los restaurantes más populares de la ciudad, a los de Londres, Tokio, Malibú, Hong Kong, Waikiki o Melbourne.

En San Sebastián, dos chefs, el francés Yannick Lohou y el japonés Hideaki Mizushima, ambos con más de 10 años de experiencia en la marca Nobu, capitanean el restaurante (casi podríamos decir el reto).

Platos icónicos, influencias vascas

Destacan en la carta propuestas como el ceviche de salmón con mango y granada, o el calamar crujiente con salsa de shisho.

Uno de los reclamos del restaurante, que se anuncia como el plato favorito de De Niro, es bacalao negro servido en cogollo de lechuga.

“Muchos de los platos de autor exclusivos de Nobu tienen que estar en nuestro menú para dar la oportunidad a nuevos clientes y a clientes habituales de todo el mundo a disfrutarlos estén donde estén. Es uno de los sellos de identidad de la marca”, apuntan los chefs.

Así, se encuentran también otros de sus hits como el rock shrimp tempura y el hamachi jalapeño. Cada plato de autor, explican desde la casa, “cuenta con una historia detrás que nuestros clientes descubrirán durante su cena de la boca de nuestros camareros”. De ahí, sostienen que “los platos de Nobu se puedan copiar, pero nunca igualar”.

Todo ello combinado naturalmente con un potente surtido de sushi, donde debe prestarse especial atención al nigiri de cangrejo real o de gamba.

Sin embargo, en una plaza como Donosti, también se hace un guiño a los productos locales, como el txanguro, la kokotxa, la merluza, el rodaballo, el mejillón, las piparras o la sal de Añana.

Así, el sushi chef Hideaki Mizushima ha incluido para la barra de sushi el tartar de gamba roja, para el que utiliza sardina, o emplea el txitxarro para hacer el Nobu New Style de la misma forma que el celebrado salmon New Style.

Para cerrar la experiencia, uno de los puntos más originales de la carta es la oferta de whiskies japoneses. Es posible tener una buena experiencia en el Nobu de San Sebastián por menos de 100 euros el cubierto, aunque no por mucho menos.

La propuesta asiática, tan de moda en la gastronomía contemporánea, tiene mérito precisamente en una ciudad donde no suelen triunfar este tipo de propuestas. Merece la pena probarlo.

Menú asequible

Además de la oferta a la carta y las posibilidades de menú Omakase (a gusto del chef), Nobu ofrece también un menú cerrado por 45€ (bebida no incluida) que incluye un primero a elegir (con propuestas como el salmón new style, la ensalada de Kale con pato confitado, el arroz crujiente con hamachi picante o la ensalada de shitake crujiente con salsa de sésamo.

Entre los principales, salmón con salsa ponzu, donburi de verduras con salsa de ajo picante, dumplings de wagyu con chimichurri de perejil (con suplemento de 5€), merluza con guiso de alubias de Tolosa o solomillo de ternera con salsa anticucho.

El menú, disponible de lunes a viernes de 13.00 a 16.00 horas y lunes y martes de 19.00 a 23.00 horas, incluye también un postre que bien puede ser la tarta de queso al estilo Nobu.