Los sindicatos de Ferroglobe responden al ERTE: piden subir sueldos por encima de la inflación

Fábrica de Ferroatlántica (Ferroglobe) en Sabón
El sindicato UGT, mayoritario en las plantas de Ferroglobe en España, avanza que pedirá a la compañía subidas salariales por encima del IPC en la mesa de negociación del tercer acuerdo marco del grupo, que ya ha sido constituida. La central señala que la prioridad es mejorar las condiciones económicas y sociales de los trabajadores de la empresa con incrementos salariales superiores al IPC y homogeneizar las condiciones laborales a nivel estatal, incidiendo, por ejemplo, en la necesidad de establecer un seguro colectivo global con las mismas coberturas para todos los empleados.
El sindicato reclama en un comunicado mejorar la interlocución social a todos los niveles, convocando de urgencia a la mesa negociadora del Plan de Igualdad al objeto de avanzar en la negociación del mismo y poder alcanzar un acuerdo cuanto antes que permita su aplicación al conjunto de las plantillas. En este sentido, ven incomprensible que la dirección de Ferroglobe haya dejado pasar nueve meses desde la última reunión de la mesa.
Incertezas con el ERTE
Las demandas de la parte social se producen después de que Ferroglobe haya presentado un ERTE para sus centros productivos en España, avanzando que podría durar hasta finales de 2024 y afectar a unas 400 personas. A finales de octubre, la dirección de Ferroglobe y los sindicatos iniciaron la negociación para la aplicación de esta medida en sus fábricas de Sabón (Galicia), Boo (Cantabria) y Monzón (Aragón) a partir del próximo mes de noviembre.
UGT pide ahora a la empresa que convoque a la mayor brevedad la comisión paritaria del ERTE para informar de su calendario de aplicación y del número de trabajadores afectados. Este expediente respondía a la situación del mercado energético, con unos altos precios de la energía que impactan especialmente a la industria electro-intensiva en España y que están afectando a las producciones de las tres fábricas desde el pasado mes de agosto, lo que obligaba a reducir su actividad al mínimo.