El Gobierno desautoriza la decisión unilateral de Castilla y León de paralizar la vacunación con Astrazeneca

Poco ha tardado el Gobierno en pronunciarse en contra de la decisión de Castilla y León de paralizar la vacunación con Astrazeneca. Minutos más tarde de que se conociera la noticia, la vicepresidenta primera, Carmen Calvo, ha arremetido contra la comunidad por tomar una decisión de este calibre, que afecta a la Estrategia Nacional de Vacunación frente a la covid-19, de forma unilateral.  

«Las decisiones de qué vacunas, con qué criterios sanitarios, en qué tramos y con qué calendario corresponde al Consejo Interterritorial de Sanidad debemos ejecutarlas todos «, ha aseverado la número dos del Ejecutivo en una rueda de prensa en Mérida junto al presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara. «Hay quién cree que puede tomar decisiones con criterios sanitarios o técnicos, pero esas decisiones están tomadas y no le corresponde a ninguna comunidad», ha añadido.  

«Esas decisiones están tomadas y no le corresponde a ninguna comunidad»

El Gobierno de Pedro Sánchez se ha tomado este movimiento del Ejecutivo del popular Alfonso Fernández Mañueco como un desafío político. «Hay quien piensa que puede tomar decisiones que no garanticen la igualdad de todos los españoles», ha asegurado Calvo visiblemente molesta, a lo que Fernández Vara ha añadido que, si alguna comunidad quiere comprar inyecciones por su cuenta, «que se salga de la alianza de vacunas y, por tanto, no disponga de las demás».

Segunda vez que Castilla y León toma decisiones unilaterales

No es la primera vez que Castilla y León toma decisiones de este calado por su cuenta. Junto a Asturias, fue pionera en a mediados de marzo a la hora de paralizar la inoculación con Astrazeneca, siguiendo la estela de algunos países europeos como Dinamarca tras la aparición de casos de trombosis.  

En aquel momento le acompañaron otras autonomías como la Comunidad Valenciana, Andalucía, Canarias o el País Vasco y, justo después, España paralizó por primera vez la campaña de vacunación con este fármaco hasta que la EMA determinó que era seguro.  No obstante, la continua aparición de coágulos de sangre entre los inmunizados ha llevado a la agencia a realizar una segunda revisión.

Aunque está por ver si en esta ocasión también se produce un efecto rebote, de momento la Consejería de Salud vasca ha asegurado que no seguirá los pasos de Castilla y León. «En Euskadi no hay cambios respecto a Astrazeneca», han confirmado a Efe fuentes del Departamento de Salud. 

España, pendiente de la Agencia Europea del Medicamento

 La desconfianza por parte de la Junta llega justo un día después de que el jefe de Estrategia de la Vacunas de la EMA, Marco Cavaleri, afirmara que, en efecto, sí existe una conexión entre los coágulos de sangre y esta inyección. «Podemos decir que está claro que hay una asociación. Qué provoca esta reacción, sin embargo, no lo sabemos”, apuntó el experto este martes una entrevista en Il Messagero. 

La EMA hará pública su revisión sobre la vacuna de AstraZeneca este miércoles a las 16.00 horas, coincidiendo también con la reunión del Consejo Interterritorial de Sanidad. Este organismo aboga por el consenso europeo a la hora de tomar decisiones, como por ejemplo los límites de edad para inocular este fármaco.

Aun así, los expertos creen que todavía es pronto para establecerlos como ya han hecho varios países, entre ellos los Países Bajos o Alemania. “Quien tiene que gestionar una campaña de vacunación, incluso sin tener todos los datos a disposición, puede decidir reservar AstraZeneca a los más mayores”, ha aclarado Cavaleri.  

No obstante, el jefe de Estrategia de la Vacunas dejó claro que estos hallazgos negativos en los efectos de la vacuna de Astrazeneca no implican que deba retirarse del mercado, sino que habrá que estudiar el riesgo-beneficio. Especialmente, según ha destacado el directivo, en las mujeres jóvenes, que en muchas ocasiones son las protagonistas de los casos de trombosis.