La política, la falta de mano de obra y los impuestos se consolidan como mayores inquietudes de la empresa
Un estudio de la Cámara de Comercio de España coloca a la situación sociopolítica (40,8%) como principal factor de riesgo para la evolución económica

El presidente de la Cámara de Comercio de España, José Luis Bonet Ferrer. Jesús Hellín / Europa Press
La situación política, la falta de mano de obra cualificada, los elevados costes laborales y la presión fiscal se han consolidado como las principales preocupaciones de la economía española, de acuerdo con el Estudio sobre Clima Empresarial en España elaborado por la Cámara de Comercio, en el que prima el optimismo de las compañías, ya que más de la mitad cree que sus negocios se mantendrán o crecerán.
El presidente de la Cámara de Comercio de España, José Luis Bonet, ha calificado de «contradicción» el análisis económico de las respuestas a las 1.900 empresas consultadas. «Su propia marcha, el 80% dice que cumple o mejora su previsión. En cambio, dicen que es un desastre la marcha de la economía en general», ha aseverado este martes durante la presentación del estudio.
«Es una contradicción que tiene que ver mucho, opinión mía, con la mala marcha de la situación política en general. En el sentido de que no hay consenso y se va produciendo una disociación entre el mundo real de las empresas y la gente y del mundo de la política», ha dicho el empresario.
El 40,6% de las empresas consultadas asegura que el incremento de los costes laborales es la dificultad más relevante para su empresa ahora mismo, seguido de la falta de perfiles cualificados (38,7%) y la elevada presión fiscal (35,6%). En cuanto a las preocupaciones, estas se repiten a futuro. El 43,1% de las compañías se muestra inquieta por la subida de los costes laborales, el 37,2% por la elevada presión fiscal y el 33,5% por la falta de mano de obra.
Sobre la economía española, el 40,8% de las empresas señala la situación política como el principal riesgo para el tejido productivo, más que la evolución de los precios energéticos (27,7%) y que la tensión geopolítica tras la guerra comercial desatada por la Casa Blanca y los conflictos armados en Ucrania y Palestina (25,8%). Llama la atención que una de cada cuatro empresas, el 25,6%, califica la falta de Presupuestos Generales del Estado para 2026 como un factor relevante de riesgo en la evolución de la economía.
En este sentido, solo el 21,1% de las empresas se muestran optimistas sobre la evolución de la economía española de cara al año que viene, frente al 78,9% que muestra una opinión pesimista sobre su evolución. Las malas perspectivas son mayores entre las pymes (79,8%) y en el sector industrial (81,7%).
«Las pymes se encuentran atosigadas y reaccionan detrayéndose y no realizan los deberes que tienen que hacer. No se internacionalizan, no invierten, no pueden. Les están atosigando con los impuestos y las cotizaciones sociales», ha criticado.
Esta es la contradicción sobre la evolución económica, ya que un 48,9% de las empresas creen que cumplen con las expectativas fijadas en este año, un 23,9% apunta que son ligeramente mejores y un 4,5% que son muy superiores a lo previsto. El 54% se sienten optimistas con respecto a la evolución de su actividad y el 52,2% lo ven como muy positivas.
La reducción de la jornada laboral a 37,5 horas semanales, si bien decayó en el Congreso de los Diputados, es una preocupación para el 20,3% de las empresas españolas consultadas.
«Es muy lógico que no haya salido para adelante, no sé por qué se tiene que decretar sobre esto. Las empresas tienen su propia posibilidad, algunas pueden hacerlo y algunas ya tienen las 37 horas, y otras no. Que dejen a la gente que se entienda, sobre todo en un país de pymes», ha dicho Bonet.
En este sentido, ha asegurado que los empresarios hablan con sus empleados y negocian sobre la jornada. «No hay una lucha de clases, lo que hay es un entendimiento. Tensiones sí, porque no llegan a final de mes los trabajadores porque les están achicharrando impuestos, achicharran igual a empresarios y pymes y tienen que ir tirando», ha justificado.
Bonet se ha manifestado también sobre la marcha atrás del Gobierno en su propuesta de subida de las cuotas de los autónomos a la Seguridad Social. «Era una barbaridad. Ya están bastante apretados los empresarios, particularmente pymes y autónomos, para que encima ahora les acaben de machacar», ha apuntado.