Altri sube su factura en Galicia con la planta en KO técnico: pagó 16 millones por el negocio forestal de Greenalia
Además de los casi 18 millones que ha inyectado en los últimos tres años en Greenfiber, la sociedad promotora del proyecto de Palas de Rei, el grupo luso cerró en mayo la adquisición de Greenalia Forest y Greenalia Logistic

José Soares de Pina, CEO de Altri, con el proyecto para la fábrica de fibras textiles de Palas de Rei de fondo
La culminación del proyecto de Altri en Palas de Rei, una fábrica celulósica y de fibras textiles a partir de madera de eucalipto, cada vez torna más complicada. Además de haberse quedado fuera de los Perte del Gobierno central, la planificación eléctrica propuesta por el Ministerio para la Transición Ecológica con el horizonte puesto en 2030 deja a la factoría sin enganche a la red, algo que, según la compañía lusa, “obligaría al territorio a renunciar a una instalación que contribuiría a su descarbonización”. Pero, pese a que la propuesta avalada por la Xunta parece estar en situación de KO técnico, la inversión del grupo dirigido por José Soares de Pina sigue agrandándose en la comunidad. De hecho, acaba de revelar al mercado que solo este año destinó casi 16 millones de euros a la operación por la que se hizo con Greenalia Forest y Greenalia Logistic, dos sociedades que conformaban la división logística y forestal del grupo gallego de renovables y que desde 2023 estaban en manos de Smarttia, holding con el que el empresario Manuel García controla la mayoría accionarial de la compañía coruñesa.
A principios de año Altri informó de la compra de esas dos sociedades en una operación que se entendió como un intento de la compañía lusa de articular toda una estructura empresarial para operar en el monte gallego con destino la fábrica de fibras textiles. La antiguamente denominada Greenalia Forest se dedica a gestionar compras a propietarios forestales así como a la venta del producto a madereras y otra empresas, entre ellas, la propia planta de biomasa de Greenalia en Curtis. La filial Logistics se centra en el transporte del producto.
A priori, estos negocios podían jugar un papel clave en la estructura empresarial de Altri en Galicia si el proyecto Gama, su fábrica en Palas de Rei con una inversión que supera los 1.000 millones de euros, finalmente saliese adelante –un extremo que, en estos momentos, pese a los plácets ambientales de la Xunta, se antoja complicada, fundamentalmente por no tener garantizada la conexión eléctrica–.
El desglose de la operación
Aunque Altri no reveló el importe de esta operación, la misma queda ahora revelada en su última memoria semestral, consultada por Economía Digital Galicia. La compañía transformó las dos sociedades adquiridas al dueño de Greenalia en Altri Forestal y Altri Forestal Logistic, de las que retiene el 100% de las acciones y que se encuentran domiciliadas en España.
Explican los administradores de la cotizada lusa en la memoria correspondiente a la primera mitad del ejercicio 2025 que el pasado mayo culminó la compra de las dos sociedades de Smarttia y que “el valor de adquisición en esa fecha ascendía aproximadamente a 15,8 millones de euros”. La compañía contabiliza como costes de adquisición un pago de 7,5 millones por las acciones de las compañías, así como 6,6 millones en concepto de asunción de deuda y otros 1,58 millones de pasivo por pagos retenidos. En total, la operación le costó esos cerca de 16 millones.
En la memoria, los dueños de la compañía portuguesa indican que “la adquisición de Altri Forestal, una de las empresas líderes del sector forestal gallego, y de Altri Forestal Logistics representó un importante paso estratégico para consolidar la presencia del grupo Altri en Galicia”. «Con esta adquisición, reafirma su compromiso con la comunidad local y sus socios», añade.
La compañía no indica, no obstante, que el destino de la madera de estas sociedades estuviese pensada para el proyecto Gama, el que pretende desarrollar en Palas de Rei. “Esta adquisición fortalecerá las fuentes actuales de suministro de madera del grupo para el proceso de producción de fibra celulósica”, expone. Lo cierto es que, sin plantas en la comunidad, tanto Altri como otras compañías lusas del sector, como Navigator, ya consumen desde hace años madera gallega.
Relación con el dueño de Greenalia
Altri guarda una relación con Smarttia que va más allá de la compra de estas dos sociedades. A través del holding inversor, Manuel García es el único socio de los portugueses en el proyecto de la planta de fibras textiles. La compañía es dueña de un 25% de Greenfiber, la promotora del proyecto.
Tal y como ya publicó Economía Digital Galicia, al margen de esos 16 millones en la compra de las empresas del dueño de Greenalia, Altri ya ha destinado a la fábrica de Palas de Rei otros casi 18 millones de euros de inversión.
Atendiendo a la última memoria publicada por Greenfiber en el Registro Mercantil, Altri y Smarttia inyectaron en los últimos ejercicios un total de 23,6 millones de euros a la sociedad. Unos fondos que fueron destinados a avanzar en el proceso de planificación, adquisición de terrenos, tramitación de permisos y promoción de una instalación que ha generado un fuerte debate social y político en Galicia. De esa cantidad, la compañía lusa aportó 17,7 millones de euros, mientras que el resto lo puso el holding que controla la mayoría accionarial de Greenalia.
Sin actividad productiva, Greenfiber es una sociedad instrumental por lo que, de forma natural, va acumulando pérdidas al ser la promotora de un proyecto que aún no está materializado. Tiene gastos pero no ingresos, más allá de las aportaciones de los socios. El ejercicio 2024 lo cerró con pérdidas de 2,8 millones; 3,17 millones en 2023 y 1,7 millones en 2022, el año en el que se constituyó.