Inditex mantiene sueldos en Ucrania y Rusia en plena debacle de sus rivales por los cierres

Los de Marta Ortega continúan pagando salarios completos en Ucrania, que se reducen a dos tercios en el caso de los empleados rusos sin actividad en estos momentos

Óscar García Maceiras

Óscar García Maceiras, CEO de Inditex, habla de una política de precios «estable» con subidas puntuales en determinadas prendas, en los mercados más inflacionarios

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H&M, gran rival de Inditex, presentó esta semana los resultados correspondientes a los primeros nueve meses de su año fiscal, de diciembre a agosto. Los beneficios cayeron un contundente 30% y su CEO, Helena Helmersson, argumentó que el tercer trimestre “se vio afectado en gran medida por la decisión de interrumpir las actividades en Rusia y posteriormente retirarnos”. Una marcha definitiva que le ha supuesto un impacto de más de 190 millones de euros.

La situación de la compañía de moda sueca contrasta con la de Inditex que, de momento, no se ha anotado en sus balances ningún impacto extraordinario por el parón en el mercado ruso, aunque sí tiene una provisión de 214 millones de euros. Los de Marta Ortega no han realizado ningún movimiento o declaración que evidencie que seguirán el camino de su gran competidor sueco y vayan a optar por abandonar, de forma definitiva, el mercado ruso, donde cuenta con más de 500 tiendas y 9.000 trabajadores según los últimos datos disponibles.

De hecho, desde marzo, a pesar de que tiene tanto las ventas físicas como las online paralizas en Rusia, continúa pagando el sueldo de su plantilla. Así se lo trasladó esta misma semana la dirección de la textil al comité de empresa europeo de Inditex, que celebró unas jornadas de reunión en Arteixo, base de operaciones del gigante textil.

La plantilla en Ucrania y Rusia

Según explica la federación de servicios de CCOO, el grupo trasladó a los representantes del comité europeo la última hora acerca de la situación en Ucrania y Rusia, en donde contaba, antes del estallido del conflicto, con 79 y 500 establecimientos respectivamente.

“Sobre la situación en Ucrania, la empresa informa que se siguen pagando salarios y que las 45 personas de la compañía que salieron del país están trabajando dentro del grupo en el lugar donde tienen ahora su residencia”, apuntan. Además, el departamento de Recursos Humanos mantiene un “contacto permanente” con la plantilla del país asediado.

Mientras tanto, en Rusia, “los trabajadores que tienen suspendido su contrato perciben dos tercios de su salario habitual mientras que los que se mantienen en plantilla para realizar las necesarias labores de mantenimiento perciben el 100%”.

Esta situación hace pensar que es poco probable que la matriz de Zara vaya a seguir el camino de otras empresas como H&M, Mango o Nike que han optado por una salida permanente de Rusia. El CEO de la compañía, Óscar García Maceiras, indicó en su última conferencia ante analistas que, de momento, nada había cambiado y que continuaban “monitoreando la situación”.

¿Una marcha definitiva?

Pero, si nada evidencia que Inditex vaya a apostar por una marcha permanente del país en un futuro, hay quien cree lo contrario. Destaca por ejemplo Credit Suisse: la casa de análisis insiste en sus últimos informes en que uno de los grandes retos del grupo en el futuro es la de poder mantener sus cifras récord a pesar de Rusia. Argumenta la financiera suiza que la provisión hecha en el primer trimestre de 216 millones de euros para blindarse ante los impactos del conflicto podría ser “demasiado optimista”, dado que “es poco probable que Rusia vuelva a abrir”.

A la hora de establecer comparativas hay que tener en cuenta que H&M, con 170 tiendas, gastará más de 190 millones de euros en cerrar sus puntos de venta en Rusia. El eventual impacto sería mayor en Inditex, teniendo en cuenta su red y que cifró en un 8% del ebitda la contribución del mercado ruso e ucraniano.

El pasado año, el beneficio antes de impuestos del negocio de Inditex en Rusia ascendió a 240 millones de euros, triplicando los 86 millones anotados el año de la pandemia y sobrepasando los 229 millones de 2019. En cuanto a Ucrania, las ganancias antes de impuestos se situaron en los 58 millones, también por encima de los 54 millones de 2019.

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