Ferroglobe llama de nuevo al mercado de deuda y emite 100 millones en pagarés tras sus números rojos
La dueña de Ferroatlántica ha registrado en el Mercado Alternativo de Renta Fija (MARF) un programa de pagarés por un máximo de 100 millones de euros y hasta dos años de vencimiento
Marco Levi, CEO de Ferroglobe
Ferroglobe regresa al Mercado Alternativo de Renta Fija (MARF). La matriz de Ferroatlántica ha registrado en el MARF un programa de pagarés por un saldo de hasta 100 millones de euros, tal y como se desprende de la documentación presentada.
La compañía que preside Javier López Madrid ya había recurrido a esta fórmula en noviembre del año pasado, si bien por aquel entonces la emisión era por la mitad del importe actual (50 millones de euros). Tanto en aquella ocasión como ahora, Ferroglobe opta por Bankinter Investment como financiador del programa (lead arranger), VGM Advisory Partners como asesor registrado mientras que como entidades colocadoras se mantienen Bankinter, PKF Attest Capital Markets y Renta 4 Banco, cayéndose así la sucursal española de Haitong Bank.
Finalmente, Uría Menéndez Abogados ha colaborado nuevamente como asesor legal en el registro de este programa impulsado por la compañía, que cuenta con una capacidad para producir 330.000 toneladas anuales de silicio metálico, 300.000 toneladas de aleaciones basadas en silicio y 560.000 toneladas de aleaciones basadas en manganeso.
Ferroglobe, que dispone de tres centros de trabajo en España (Sabón, Boo y Monzón, ubicados en Galicia, Cantabria y Aragón, respectivamente), se lanza al MARF en busca de esta financiación a corto plazo que permita dotar a la compañía de una liquidez extra.
La compañía recurre a España, país al que trasladó su sede en 2019 (anteriormente tenía su base de operaciones en Londres) para recurrir a estos pagarés que tienen un vencimiento de hasta dos años. El movimiento se produce después de que la compañía hiciese públicos los resultados cosechados en el tercer trimestre del año.
Más de 78 millones en pérdidas este año
Ferroglobe dio cuenta de unos nuevos números rojos por valor de 11,5 millones de euros. Estos se suman a los 9,2 millones de euros que la firma se anotó en pérdidas en el segundo trimestre y a los 57,7 millones registrados entre enero y marzo. De esta forma, la dueña de Ferroatlántica eleva hasta los 78,4 millones de euros sus pérdidas en lo que va de un año en el que se ha enfrentado a condiciones de mercado «difíciles».
Marco Levi, consejero de la compañía, definía así el entorno marcado por las «las importaciones a la Unión Europea a precios agresivamente bajos», si bien revelaba sus esperanzas en que Bruselas siga el ejemplo de Estados Unidos y adopte medidas antidumping como las aprobadas por la Administración Trump.
En el caso de prosperar, se trataría de medidas que «deberían ayudar a los productores nacionales a recuperar cuota de mercado». «Como principal productor nacional tanto en Europa como en Estados Unidos, somos optimistas de que las condiciones del mercado en 2026 serán significativamente más favorables para Ferroglobe», destacaba Levi.
Los números de Ferroglobe
Y es que este cambio en las condiciones de mercado se ha traducido en un recorte de ingresos del 21,2% para Ferroglobe (hasta los 873,3 millones de euros) y del 91% en su ebitda (11,3 millones). Además, este viento de cara ha provocado que la compañía que preside Javier López Madrid se encamine a las que serían sus primeras pérdidas anuales desde el año 2021. Ese año estuvo marcado por la refinanciación de deuda y la aplicación de un plan estratégico que miraba con lupa los costes energéticos, instauraba las compras centralizadas y dictaba el recorte temporal de la capacidad productiva de su red de plantas en Europa, Norteamérica, Sudamérica, África y Oceanía.
Ferroglobe cosechó unos números rojos por importe de unos 82,8 millones de euros para, a continuación, dar la vuelta a su cuenta de resultados y ganar 317 millones en 2022, 75,5 millones en 2023 y 4,5 millones en 2024. Durante este periodo, la multinacional que tiene al Grupo Villar Mir como máximo accionista (controla un 36,2% de su capital) saneó su situación financiera y llegó a presentar una posición de caja neta de 33,6 millones de euros al término del año 2024. Sin embargo, los números rojos cosechados en los últimos meses han llevado a la firma a presentar de nuevo una deuda neta de 5,2 millones de euros (menos de la mitad que su ebitda).