O’Leary, el CEO que crispa al Gobierno de Sánchez: séptimo accionista de Ryanair y cobrará 100 millones en 2028
Con una participación de más de un 4% en el capital del grupo de aviación, valorado en más de 1.000 millones de euros, el ministro Puente ha criticado los pagos al ejecutivo en medio de la espantada de los aeropuertos medianos, como Santiago y Vigo

Imagen de archivo del consejero delegado de Ryanair, Michael O´Leary. Foto: EFE
En el terreno económico uno de los grandes protagonistas de la semana ha sido Michael O´Leary, el CEO de Ryanair. La aerolínea irlandesa ha declarado la guerra a Aena y ha anunciado un considerable hachazo a su operativa en los aeropuertos medianos y pequeños de España en los que tiene presencia con la justificación de la subida de tasas proyectada por el Gobierno para el año que viene. Cerrará su base en Santiago de Compostela, eliminará todos los vuelos a Vigo y Tenerife, mantendrá la persiana bajada en las bases de Valladolid y Jerez y reducirá capacidad en Asturias, Santander, Zaragoza y Canarias este invierno. El ejecutivo de Pedro Sánchez, por boca del ministro de Transportes, Óscar Puente, ha sido contundente contra la compañía, considerando que lo que está haciendo es un “chantaje” en toda regla. Creen que el incremento de tasas es asumible, más en un grupo que va a dar a su primer ejecutivo un bono millonario de 100 millones de euros.
Controvertido por sus respuestas y su estilo empresarial agresivo, Michael O´Leary, de 64 años, comenzó a ocupar puestos de alta dirección de la compañía en 1988, siendo director de Ryanair DAC. Nombrado director general de Ryanair en 1994 y director general de todo el grupo en 2019, ocupó también el cargo de director financiero desde 1988, según se indica en la memoria anual del conglomerado aeronáutico consultada por Economía Digital Galicia.
Fortuna de más de 1.000 millones
Durante años, el ejecutivo fue atesorando una considerable fortuna por los emolumentos que recibía por sus cargos tanto en efectivo como en acciones. No en vano, es uno de los grandes accionistas del grupo. En concreto, el séptimo, como una participación de un 4,1% en el capital de la firma. La compañía que ha desatado una crisis con Aena y, por extensión, con el Ejecutivo español, está en manos de los fondos.
Su primer accionista es Capital Group, con una participación equivalente a un 13% del capital, seguido de HSBC Holdings, Parvus Assets Management, MFS y la gestora Baulie Gifforf. La participación del ejecutivo supera, por ejemplo, a la de fondo Fidelity. Con una capitalización bursátil que se acerca a los 25.500 millones de euros, el paquete accionarial del consejero delegado estaría valorado en algo más de 1.000 millones.
Pero, además, tal y como recordaba estos días el ministro Puente, O´Leary se hará, con toda probabilidad, dentro de tres años, con un bonus millonario de su empresa de más de 100 millones de euros.
Los requisitos de un bonus millonario
Para lograr este millonario bonus, no obstante, deberían darse varias condiciones. Que hasta el 2028 el beneficio neto del grupo después de impuestos superase los 2.200 millones de euros o que el precio de la acción de la compañía sobrepasase los 21 euros durante un periodo de 28 días consecutivos entre el 1 de abril de 2021 y el 31 de marzo de 2028, una exigencia que ya se habría cumplido. Eso sí, la condición final para recibir la millonaria bonificación es que el irlandés permanezca en su puesto hasta, al menos, finales de julio de 2028.
Además, el pasado ejercicio, 2024-2025, entre su salario base de 1,2 millones, bonus en cash y acciones, el ejecutivo se levantó un sueldo de 3,83 millones frente a los 4,86 millones del año anterior.
Los datos de Ryanair
La compañía de Michael O´Leary cierra su año fiscal a finales antes de abril. El pasado ejercicio 2024-2025, la firma se anotó un beneficio neto de 1.612 millones de euros, un 16% menos que los 1.920 millones obtenidos el año anterior en buena medida por la caída del precio medio de venta de billetes. Las ventas, no obstante, se incrementaron un 4%, hasta los 13.950 millones.
Con todo, pese a la caída de beneficios del pasado ejercicio, la compañía volvió a mejorar sus métricas en el primer trimestre de 2025, entre abril y junio. Obtuvo un beneficio neto de 820 millones de euro frente a los 360 millones del mismo periodo del año anterior, con lo que disparó ganancias en un 130%.
En el citado periodo, que se vio beneficiado por la Semana Santa, la cifra de negocio se fue a los 4.337 millones, casi un 20% más.