Actualizado
El plan eléctrico del Gobierno allana el camino a Ignis, Reganosa, Acciona y Ence, pero condena a Altri
La planificación energética con el horizonte en 2030 diseñada por el Ejecutivo, y que entra en fase de alegaciones, prevé refuerzos en la red que también favorecerían proyectos como el de Forestal del Atlántico y posibles centrales de bombeo ubicadas en As Pontes, Meirama y Ourense

La conselleira de Economía e Industria, María Jesús Lorenzana, se reúne con el secretario de Estado de Energía, Joan Groizard, y con responsables de Red Eléctrica. Foto: Xunta de Galicia
Los proyectos industriales que brotaron en Galicia al abrigo de los fondos europeos y del proceso de descarbonización generaron también nuevas necesidades en capacidad de acceso a la red eléctrica. Las iniciativas empresariales necesitan un lugar donde enchufarse, y eso requiere de redes, subestaciones y permisos de conexión. A poder ser, los suficientes para todos. Por este motivo, la Xunta lleva tiempo reclamando un refuerzo de la red eléctrica en la comunidad, con una mejora de la infraestructura para acoplar la nueva generación renovable, la incorporación de más nudos de evacuación con la vista puesta en la eólica marina, y unos 1.200 megavatios adicionales para asegurar el suministro a la nueva industria.
Las dudas que albergaba el Gobierno gallego en torno a estos tres ámbitos de la planificación eléctrica han comenzado a despejarse este martes. El secretario de Estado de Energía, Joan Groizard, presentó a la conselleira de Economía, María Jesús Lorenzana, el escenario inicial de la planificación de la red de transporte 2025-2030. Es una primera foto, a la que se pueden presentar alegaciones y propuestas en el trámite de audiencia pública, pero que promete, dice el Ministerio, capacidad adicional para que las redes gallegas atiendan a nuevos consumos que prácticamente duplicará el pico de demanda registrado el año pasado, de 2,2 GW.
A Coruña, Ferrol y As Pontes ganan músculo
El diseño inicial, lo que el Ministerio para la Transición Ecológica define como escenario técnico de partida, beneficiará mediante aumentos de capacidad de la red eléctrica a los proyectos ubicados en As Pontes, una zona de transición justa por el apagón de la térmica de Endesa; y a los planteados en las áreas de Arteixo, A Coruña y Ferrol, según explicaron a este medio fuentes conocedoras del borrador. En Meirama, otra zona de transición justa tras el cierre de la central de Naturgy, el refuerzo será menos relevante que en los otros enclaves, indican estas fuentes.
El Gobierno prevé en el nuevo plan más de un centenar de nuevas posiciones y actuaciones en una treintena de subestaciones para mejorar la infraestructura eléctrica, pero la parte más débil de la planificación está en Lugo. Al menos, a ello apuntó la conselleira de Economía al señalar que estaba «razonablemente satisfecha» con el resultado de la reunión «para buena parte del territorio y, en concreto, para tres provincias que son A Coruña, Pontevedra y Ourense». Pero no así Lugo, pues está «siendo eliminada del mapa industrial, al no estar reforzada en ningún punto, en ninguna zona para el consumo industrial”, por lo que «no se podrá instalar ninguna industria mediana o grande en esta provincia» durante la nueva planificación.
Golpe a Altri
Esto incluye, claro, a Altri y su fábrica de pasta soluble y fibras textiles de Palas de Rei. La pastera lusa, que calcula una inversión próxima a los 1.000 millones, preveía conectarse a la red mediante una subestación eléctrica propia, que serviría como punto de interconexión a una línea de 220 kV hacia otra subestación instalada por Redeia. Sin embargo, el Gobierno rechazó implementar esta infraestructura al entender que la compañía no cumplía los requisitos, según anticipó el secretario xeral de los socialistas gallegos, José Ramón Gómez Besteiro.
El grupo que dirige José Soares de Pina no se ha pronunciado todavía sobre el futuro del proyecto una vez denegada la conexión eléctrica, que se suma a la negativa a las ayudas públicas que había solicitado en el Perte de descarbonización. La fábrica de Palas de Rei cuenta con una declaración de impacto ambiental favorable, pero no está cumpliendo el resto de hitos que se marcó Altri, entre ellos, el de conseguir aproximadamente un 25% de la inversión mediante fondos públicos.
Espacio para Ignis, Reganosa y Ence
La nueva capacidad prevista en la planificación de la red de transporte facilitaría, en cambio, el desarrollo de varios proyectos ubicados en la provincia de A Coruña. Uno de los más reseñables es el valle del hidrógeno de Ignis, que promueve a través de su filial Armonía Green. La compañía proyecta el desarrollo de una planta de producción de amoníaco verde en el Puerto Exterior de Punta Langosteira y otra de producción de hidrógeno en la antigua planta de Alcoa que compró Resonac en A Coruña con una capacidad de 200 megavatios, aunque ampliable a 400. Esta iniciativa recibió 130 millones en fondos europeos. El refuerzo del nudo de Sabón también permitiría enchufar la planta de hidrógeno de 50 millones que promueve Acciona en Morás, con un electrolizador de 20 MW.
El mapa del Gobierno también prevé actuaciones que facilitarían las interconexiones del proyecto Triskelion, promovido por Forestal del Atlántico con el objetivo de producir metanol verde en Mugardos; así como la planta de hidrógeno de Reganosa y EDP en As Pontes, y la fábrica de fibra reciclada de Ence en este mismo municipio. El desarrollo de estas tres instalaciones requeriría de una inversión próxima a los 700 millones.
Cabe destacar que Forestal del Atlántico y Reganosa promovieron un valle del hidrógeno mediante la conexión de sus dos proyectos, lo que se conoció como ValdoEume. Sin embargo, esta iniciativa no recibió el apoyo del Gobierno a través de los fondos europeos, a diferencia de Ignis, por lo que su ejecución está en el aire.
Meirama y las centrales de bombeo
La otra zona de transición justa de Galicia, Meirama, también contaría con mejoras, aunque de menor impacto que en A Coruña o As Pontes. En todo caso, las fuentes consultadas indican que podría bastar para el desarrollo de la central hidroeléctrica reversible de Tasga. En la zona donde apagó su central térmica, Naturgy promueve junto a Repsol y Reganosa una planta de hidrógeno de 64 millones que contará, en una primera fase, con una potencia de 30 megavatios (MW), aunque escalable posteriormente hasta 200 megavatios.
La nueva capacidad de la red, de hecho, abre la puerta también a los otros enclaves donde se proyectan centrales de bombeo, como As Pontes u Ourense, promovidas en este caso por Magtel, Reganosa y el gigante Iberdrola.
Iberdrola en Ourense
Aunque en la planificación eléctrica no se habla específicamente de proyectos, es conocido que Iberdrola, la compañía líder en la comunidad gallega en generación de energía hidráulica, tiene en cartera un gigantesco proyecto de bombeo: el denominado Conso II, en Ourense, en la cuenca del Sil. Este conectaría dos embalses que ya explota en la actualidad: el de O Bao, a menor altura, con el de Cenza, el de mayor caída de Europa.
Aunque la compañía no ha dado datos públicos del presupuesto, distintas informaciones indican que podría alcanzar los 1.500 millones. Ya hace unos meses que los de Ignacio Sánchez Galán indicaron a este medio que el proyecto aún está en una fase inicial, iniciando trámites. La decisión de inversión final, en todo caso, pasa por el cumplimiento de dos supuestos. El primero, disponer de una concesión hidráulica a largo plazo y que se ponga en marcha un mecanismo de pagos por capacidad, una pretensión que parece figurar dentro de los planes de la ministra para la Transición Ecológica, Sara Aagesen, que ha retomado el proyecto de su predecesora, Teresa Ribera, para crear un mercado de capacidad que garantice la seguridad de suministro en momentos críticos.
As Pontes y Meirama
Por otro lado, Augas de Galicia indicó recientemente a este medio que en la actualidad estaba analizando dos proyectos reformulados para poner en marcha centrales de bombeo usando como una de las balsas el lago de Endesa en As Pontes. Uno estaba impulsado por Reganosa y otro por la compañía andaluza Magtel. Los dueños de la regasificadora de Mugardos, en su momento, plantearon este proyecto de la mano de EDP para poder suministrar energía limpia a la planta de hidrógeno verde proyectada en As Pontes.
En Meirama, la compañía de capital gallego Tasga Renovables también acaba de conseguir de la Xunta la declaración de proyecto estratégico su propuesta para levantar una hidroeléctrica reversible que usaría el lago de la antigua térmica como una de sus zonas de captación de agua. La compañía prevé una inversión de 443 millones para levantar una central de 440 MW. Esta nueva central, de salir adelante en los términos planteados, se conectaría a la red a través de la subestación eléctrica de Meirama.