Urovesa suma y sigue: vende otros dos Vamtac al Ejército por 1,4 millones
El Mando de Apoyo Logístico del Ejército de Tierra ha adquirido dos modelos de Vamtac STS por 1,44 millones de euros

El consejero delegado y presidente de Urovesa, Justo Sierra – APD – Archivo
Nuevo contrato de Urovesa de la mano de sus Vamtac. El Mando de Apoyo Logístico del Ejército de Tierra ha sellado la adquisición de dos Vamtac STS en un contrato valorado en 1,44 millones de euros.
Según avanza Infodefensa, la compañía que capitanea Justo Sierra tiene de plazo hasta el 15 de diciembre para llevar a cabo la entrega de estos dos vehículos especializados en la desactivación de artefactos explosivos.
La operación se enmarca dentro de un Acuerdo Marco ya existente y contempla una garantía posventa de dos años, así como una obligación de mantenimiento del suministro de respuesta por un mínimo de 20 años.
“El vehículo resultante tiene los estándares más altos de blindaje, así como una capacidad de carga modular para todo el equipo que tienen los desactivadores”, destaca el Ejército en su boletín digital. El Vamtac dispone de una caja blindada (Zarges) para el transporte de explosivos y otras dos para el traslado de detonadores. También cuenta con un afuste para ametralladora MG3.
Además, el vehículo integra un sistema de conciencia situacional. No en vano, el automóvil dispone de un mástil telescópico anclado el techo con capacidad de visión diurna e infrarroja, un proyector de 100W y soportes para antenas. Además, según Infodefensa, las cuatro cámaras proporcionan una visión de 360 grados al equipo mientras realiza los trabajos de desactivación de artefactos.
Contrato y préstamo
Urovesa capta, de esta manera, 1,4 millones días después de que el Consejo de Ministros anunciase la adjudicación de un préstamo de 132 millones de euros para fabricar un nuevo tipo de vehículo para el Ejército.
“Responde a la necesidad de dotar a las Fuerzas Armadas de la capacidad de explorar, reconocer y vigilar el terreno desde una posición segura”, ha defendido el Gobierno, que también inyectará fondos en empresas como Indra, Santa Bárbara o Navantia, la principal referencia en la comunidad en cuanto a los proveedores del Ministerio de Defensa.
El Gobierno destacaba que mediante estos movimientos se busca proporcionar superioridad en el enfrentamiento, una capacidad militar esencial, la cual permite la ejecución precisa de operaciones, tanto en primera línea como en líneas sucesivas.
El procedimiento de concesión directa de los préstamos se justifica por el carácter singular de los programas, destinados a dotar a las Fuerzas Armadas con las capacidades que requieren a través de la adquisición de material de defensa de distinto tipo que, por su propia naturaleza, exigen importantes prefinanciaciones con carácter previo al suministro.