El gran dividendo de la cerveza: Heineken triplica a Estrella Galicia y supera a Mahou y Damm juntas
La filial española de Heineken, dueña de marcas como Cruzcampo, repartió un dividendo a su matriz holandesa de 194 millones con cargo a los resultados de 2024 frente a los 100 millones de Mahou, los 80 de Damm y los 55 de Estrella
 
				De las grandes cerveceras, Heineken España, que explota marcas como Cruzcampo o El Águila, fue la que más dividendos repartió: casi 200 millones a su matriz. Foto de la Torre Cruzcampo en Sevilla: Rocío Ruz / Europa Press
Las cuatro grandes compañías cerveceras en España acordaron el reparto de 429 millones de euros a sus accionistas en base a los resultados obtenidos en 2024. Se llevó la palma la filial española de Heineken que cerró el ejercicio triplicando beneficios, hasta los 208 millones y distribuyendo un dividendo de 194,1 millones de euros. La dominante directa de la compañía detrás de marcas como Cruzcampo o El Águila es la sociedad Heineken Internacional BV, a su vez, dependiente de la matriz del grupo holandés: Heineken NV. Este pago a socios es más de tres veces superior al que dio Hijos de Rivera, la dueña de Estrella Galicia, y sobrepasa las abultadas cifras de Mahou y de Damm juntas.
Heineken es un gigante mundial de la cerveza que cotiza en la bolsa holandesa y que maneja una capitalización bursátil de unos 39.000 millones de euros. La pasada semana presentó los resultados correspondientes, como grupo, a su tercer trimestre fiscal. En esos tres meses facturó 8.712 millones de euros, un 4% menos frente al mismo periodo del año anterior. Los ingresos netos retrocedieron un 3%, hasta los 7.330 millones de euros. El grupo destacó que el volumen total consolidado se redujo un 3,8%, pero que el ingreso neto ajustado por hectolitro subió un 3,6%.
En lo que se refiere al mercado español, indicó que el volumen de cerveza comercializado se mantuvo “fundamentalmente estable”, aunque por encima del mercado, gracias al buen comportamiento de las marcas Ladrón de Verano y Desperados. En los nueve primeros meses del año, las ventas acumuladas se fueron a los 25.636 millones de euros, un 4,7%. Su consejero delegado, Dolf Van den Brink, explicó que las previsiones de la compañía, pese a la volatilidad del mercado este año, pasan por alcanzar “un ahorro bruto de 500 millones de euros” e incrementar el beneficio operativo orgánico entre un 4 y un 8%.
Con un trasatlántico de estas características que, además, cotiza en bolsa, el fuerte reparto de dividendos de las filiales a la matriz es comprensible. No obstante, pese a su envergadura, tal y como ocurre con Mahou, Damm y Estrella Galicia, Heineken también nació como un grupo de marcado carácter familiar.
Heineken
En la actualidad, la sociedad Heineken Holding NV retiene un 50,005% del capital de Heineken NV, siendo su primera accionista. A la vez, el 53,1% de las acciones de la misma están en manos del vehículo L´Arche Green, conformado por las familias fundadoras de la cervecera. El 88,9% está en manos de la saga de los Heineken y el 11% en la de los Hoyer, según la documentación consultada por este medio.
Heineken España logró disparar el dividendo el pasado ejercicio debido al notable avance de su beneficio. Sus cuentas recientemente remitidas al Registro Mercantil y consultadas por este medio a través de la plataforma Insight View, indican que en 2024 se anotó un retroceso en su cifra de negocio, que pasó de los 1.085 millones a los 1.035 millones de euros. Sin embargo, marcó un beneficio histórico de 208,2 millones de euros, el triple de los 67 millones cosechados en 2023.
No obstante, en el incremento del resultado fue clave el reconocimiento de una reversión de deterioro de 115 millones en las inversiones en las empresas dependientes Brew Master Hub y Sociedade Central de Cervezas e Bebidas. Además, también formalizó un contrato de venta de activos a Refrival por valor de 33,8 millones de euros pagaderos en cuatro años.
Mahou
Tras Heineken España, la cervecera española que más dividendos repartes es Mahou. La firma dueña de las marcas Mahou, San Miguel, Alhambra o Solán de Cabras cerró el ejercicio 2024 con un beneficio neto que se incrementó un 5,9% hasta los 114,8 millones de euros y con una facturación récord de 1.933,5 millones, aunque solo se estiró un 0,8% con respecto a 2023.
Según sus últimas cuentas consolidadas, durante el pasado año, los accionistas aprobaron la distribución de un dividendo a cuenta de los beneficios del ejercicio de 100,13 millones de euros, la misma cantidad que en 2023. Los administradores de la compañía indican en su informe de gestión que este abultado reparto es posible “debido a la existencia de liquidez suficiente”, contando con una tesorería en diciembre de 2024 que ascendía a 425,4 millones.
El gigante cervecero madrileño es una empresa familiar. Con Alberto Rodríguez-Toquero como consejero delegado, el 50% de las acciones de la compañía están en manos de la familia Mahou, reteniendo la otra mitad la familia Gervás.
Damm
En tercera posición en el particular ranking de los dividendos cerveceros se encuentra Damm, el grupo de Demetrio Carceller. Con un porfolio mucho más diversificado que, además de cerveza, suma productos lácteos, como el Cacaolat, aguas, cafés, refrescos e incluso cadenas de restauración, el grupo acabó 2024 superando la barrera de los 2.000 millones, hasta los 2.025 millones, aunque su cifra de negocio consolidada se redujo un 1,7%.
Con unos activos de 2.315 millones (2.065 millones en el caso de Mahou), el beneficio neto del ejercicio se disparó casi un 35%, hasta los 175,9 millones de euros. Según indican sus administradores en el informe de gestión de su última memoria anual, el consejo de administración del grupo propuso a la junta de accionistas destinar a dividendos 80,2 millones de euros. De esa cantidad ya se habían repartido en el propio ejercicio 2024 más de 32 millones.
A cierre del año pasado, solo tres sociedades poseían participaciones mayores al 10% del capital de la compañía, siendo el primer accionista la familia Carceller. El presidente del grupo cervecero, Demetrio Carceller, está detrás de los vehículos Disa Corporación Petrolífera, con un 33,5% de las acciones, y Seegrund BV, que retiene un 16,95%. El segundo mayor accionista es la sociedad Murom GMBH, con el 25,34% del capital. Esta sociedad está en manos del conglomerado alemán dueño de la marca Dr. Oetker.
Hijos de Rivera
Hijos de Rivera, la corporación dueña de Estrella Galicia, también reparte un dividendo millonario, aunque todavía muy lejos de los de Heineken, Mahou o Damm. El conglomerado coruñés presidido por Ignacio Rivera finalizó el pasado ejercicio con una cifra de negocio que se estiró casi un 7% hasta los 886 millones, siendo, de las grandes cerveceras españolas, la que más creció porcentualmente.
Los coruñeses también son los primeros en cuanto a rentabilidad, con un resultado de 95 millones de euros, que cayó desde los 107 millones firmados en 2023 principalmente por la amortización del a millonaria inversión acometida para la puesta en marcha de la factoría de Morás (Arteixo) con la cual dará un salto de escala en cuanto a volumen de producción.
La cervecera contaba con una capacidad cercana a los 500 millones de litros anuales a través de las instalaciones en el polígono de Agrela, en A Coruña. En su “segunda cocina” cuenta ya con una capacidad para producir unos 300 millones de litros de cerveza y podrá llegar a los 1.000 millones de litros de cerveza anuales en un futuro, cuando se complete toda la inversión en la planta.
Con estos datos sobre la mesa, el consejo de administración de la compañía propuso el reparto de un dividendo a cuenta de los resultados de 2024 de 55,8 millones de euros, ligeramente por encima de los 53,6 millones de 2023.
El capital de la compañía se reparte entre distintas ramas de la familia Rivera. Hace unos meses, en una entrevista en Expansión, Ignacio Rivera recordaba que el grupo cuenta “con 18 ramas familiares distintas”. Se estima que son unos 40 socios distintos los que, cada año, ingresan los dividendos de una compañía en plena expansión y que cuenta con mejores márgenes que sus competidores, aunque estos tengan mayor volumen de ventas.
 
						 
						 
						 
						 
								